-¿Cuándo vio que las telecomunicaciones móviles eran un buen campo donde explorar?
-En 2002, un año antes de que arrancara Itsoft, hice un estudio de mercado dentro del sector y vi que había muchas posibilidades. Entonces sólo se conocían los SMS y se preveía que florecerían necesidades de otras aplicaciones durante esta década. La idea era dar soluciones a los operadores para que ellos, a su vez, las dieran a los clientes, aunque también ofertamos servicios directos a empresas. Por ejemplo, en productos para pymes, tenemos un potencial muy alto de crecimiento.
-¿Cómo ha cambiado el mercado, teniendo en cuenta el frenético crecimiento que vive?
-Al principio tenía que explicarle al cliente en qué consistían las aplicaciones móviles, porque la gente no lo visualizaba. Ahora es él el que nos llama para pedirnos soluciones.
-¿Cuáles son los sectores que más reclaman sus servicios?
-La administración pública, sobre todo los entes locales, y la gran empresa. Aquí en Sevilla hemos movilizado los procesos de Heineken y colaboramos con Abengoa en este sentido. Así, los directivos pueden hacer todas sus funciones sin necesidad de estar delante del ordenador.
-¿Qué productos destacaría de la trayectoria de Itsoft?
-El REUR 072 de Sevilla es significativo [un dispositivo del Ayuntamiento que da respuesta inmediata a las incidencias que se producen en la vía pública para su óptimo mantenimiento], porque no sólo hemos elaborado la aplicación móvil, sino además el mecanismo para comunicarse con el Consistorio por distintos canales, como SMS, MMS o internet. Y la parte de la comunicación de los técnicos también. En paquetería, acabamos de lanzar un producto para asegurar que la entrega de bultos es correcta. Otro producto es la localización por GPS, proyecto desarrollado con Minerva. Sirve para localizarte a ti mismo en un periodo y poder visualizar luego la ruta. Las herramientas de localización de dispositivos también están ahora muy solicitadas, porque con ellas se pueden optimizar las rutas y dar mejor servicio.
-También tienen un apartado específico para la banca.
-El producto más importante en este sector es la gestión de aprobaciones de movilidad con firma electrónica en el móvil. Con esto, el director de una sucursal puede aprobar gestiones como si estuviera en la oficina, como las vacaciones de sus empleados o el visto bueno a una hipoteca. Otra de las aplicaciones que sirven para la banca, pero también para otros sectores, es la mensajería masiva a través del móvil vía SMS o MMS. En esta cuestión trabajamos con Renfe, el Ministerio de Trabajo o el antiguo INEM. Este último lo usa para dar avisos o alertas a los demandantes de empleo.
-¿Este tipo de servicios no corre el peligro de quedarse obsoleto en poco tiempo?
-No se quedan atrás porque ahora las terminales del móvil permiten incluir versiones anteriores. Los productos son muy nuevos y, aunque tengan dos años y se puedan actualizar, la base es la misma, y ésa durará.
-¿De dónde le vienen los encargos en la actualidad?
-Vendemos por toda España, incluso hemos abierto una delegación en Madrid. En el extranjero hemos realizado trabajos en México y estamos intentando abrir mercado en Europa, en países como Grecia o Portugal.
-¿Y se plantea ampliar el mercado suramericano?
-Sí, pero no sólo queremos llegar ahí, ya que el idioma no es un problema. Ésa es la ventaja, que el mercado es muy amplio, aunque claro, conlleva que la competencia sea mundial. Pueden hacernos frente desde Canadá o Suráfrica. El potencial es grande, pero también los competidores.
-¿La cultura tecnológica andaluza es aún insuficiente?
-Sí, bastante, pero no sólo la de Andalucía, sino la de toda España. Queda mucho por hacer, porque hay muchos que quieren continuar con las cosas como hasta ahora y eso es imposible.
-¿Qué sectores son más conscientes de ello?
-El sector de la distribución de alimentos y bebidas está muy avanzado. Trabajamos con bodegas de Jerez y de El Puerto de Santa María. La administración pública también se está preocupando por las aplicaciones móviles para mejorar el contacto con los ciudadanos.
-¿Y la crisis cómo afecta a un sector en pleno auge?
-Prevemos crecer este año, aunque quizás menos que en ejercicios anteriores. La incertidumbre está ahora en qué pasará en 2010. Lo que sí notamos es un retraso a la hora de decidirse a contratar algo, lo que dilata el resto de las operaciones.
-¿Hacia dónde tiende entonces el futuro de la empresa?
-Se tiende a ganar productividad con menos esfuerzo. Si eres vendedor, por ejemplo, no tienes que perder el tiempo haciendo un informe, sino que puedes grabar tu trabajo directamente. Las empresas podrán verificar que el trabajo se hace de forma correcta. También se gana en desplazamiento, no habrá que ir en muchos casos a la oficina. Y con todo ello se reducirán los costes, pero se venderá más. Incorporar estos dispositivos es equivalente a cuando entraron el fax y el teléfono en las empresas. Aquélla que no lo implante se quedará atrás, porque la movilidad se impondrá.