El cambio y la esperanza que transmite el presidente de EEUU, Barack Obama, ha sido traducido en Cádiz en forma de galleta de chocolate. Dos empresarios han sacado al mercado las ya populares Obamitas. El único objetivo:"Poner una nota de humor a tanta noticia sobre la crisis económica".
Quien hace esta afirmación es uno de los socios de la firma gaditana Neos Brand y que responde al nombre de -paradojas de la vida- Fidel Castro. Junto a su hermano Javier pusieron en marcha a primeros de año un estudio dedicado íntegramente al diseño gráfico, a las creaciones publicitarias y al marketing.
Su profesión es la de creativos y no la de pasteleros. Cansados de leer tanta noticia pesimista sobre la crisis económica, que ya les aburría, estuvieron dándole vueltas a la cabeza para tratar de poner en la sociedad una nota de humor y simpatía que, al menos, quitara las penas durante un rato y encima les sirviera como estrategia de marketing para promocionar su empresa, que la crisis aprieta a todos por igual.
Así, el pasado mes de enero la investidura del nuevo presidente norteamericano que tuvo pendiente a casi la totalidad del planeta les terminó de encender la bombilla. Y la mecha que prendió la luz la vieron en el regalo que Obama entregó a su antecesor, George W. Bush. Aquella caja blanca bien adornada con un lazo se supo más tarde que contenía galletas. "Y eso decidimos, hacer galletas", matiza Fidel.
Aún así, no son unas galletas cualquiera, sino que tienen un mensaje de optimismo. Además de que, lógicamente, sirven para comer, están pensadas para divertirse. La caja, una vez abierta, se abre en cuatro partes -fíjese en la fotografía que ilustra esta página- y en cada una de ellas aparece un claro mensaje. "Reparte más abrazos; da más besos; piensa en positivo y sonríe".
Según los creativos de Neos Brand, apoyados en estudios científicos, el buen humor en el trabajo y en la vida aumenta el rendimiento laboral y ayuda a crear un estado de felicidad a quien lo posee y a quienes le rodean.
Hasta ahí la parte creativa de la idea. Todo bien, pero la caja, muy bien diseñada, seguía estando vacía. Fidel y Javier tenían que ir al grano. Y el grano estaba en el obrador Antonio Butrón de Chiclana (Cádiz). Allí, se presentaron los dos creadores para decirle a la encargada que les hiciera unas galletas con la cara de Obama. Lógicamente, en el obrador se quedaron a cuadros pero probando y probando llegaron a la idea final: una galleta de chocolate, elaborada de forma completamente artesanal que emula la cara del flamante presidente de Estados Unidos.
A partir de ahí, a vender y a vender. Fundamentalmente, la distribución se hace a través de internet. En la web www.obamitas.com se pueden hacer los pedidos para adquirir los dos tipos de cajas, una de 150 gramos (8,90 euros) y otra de 250 gramos (12,90 euros). Lógicamente en el propio obrador de Chiclana también se despacha directamente al público.
El siguiente paso que quieren dar estos dos jóvenes gaditanos es potenciar la venta de forma internacional. Hasta ahora, la web solo admite pedidos nacionales. "Los internacionales que hemos hecho han sido, de momento, cosas muy puntuales como uno que nos solicitaron desde Alemania", aclara Castro.
Y el paso que aún les queda por dar, lógicamente, es que las gallegas se las pueda merendar una tarde en el despacho oval el propio Barack Obama, y quién sabe, si le tira una a su nuevo perro de aguas portugués, Bo. "De momento, es una cuestión que estamos trabajando a través de la Embajada de Estados Unidos en España porque el envío habría que hacerlo mediante valija diplomática. Por correo ordinario no se pueden mandar alimentos a EEUU", explicó Castro. Sólo toca esperar y ver si cuando a Obama le llegue la hora del adiós, le regala a su sucesor, con otro buen lazo, una caja Obamitas.
