El obispo auxiliar de Tegucigalpa, Juan José Pineda, aseguró hoy que "hay mucho diálogo a distintos niveles" en busca de alcanzar un acuerdo que permita salir de la crisis política abierta en Honduras desde el 28 de junio pasado.
"No solamente se está haciendo lo que yo estoy haciendo", agregó a los periodistas extranjeros el prelado, que la semana pasada se entrevistó con el presidente depuesto, Manuel Zelaya, y el gobernante de facto, Roberto Micheletti.
Reconoció que ha sido medio de interlocución entre Zelaya, derrocado hace tres meses, y Micheletti "y no solamente una vez", pero rehusó desvelar el contenido de las conversaciones con ambos porque han hecho, dijo, "un pacto de confidencialidad entre los tres".
"Aunque haya personas que no les gusta que yo esté haciendo esto a mi no me importa, yo no necesito la carta presidencial ni a Roberto Micheletti ni a Manuel Zelaya para servir a mi país", afirmó el religioso.
"Hay otros encuentros que no me corresponde a mi revelar quiénes son y con quiénes se están encontrando, pero gracias a Dios sí hay diálogo y yo creo que nos estamos poniendo dentro de los zapatos de la esperanza", afirmó Pineda, que se entrevistó con Zelaya en la Embajada de Brasil, donde el presidente depuesta se encuentra desde el pasado día 21.
El obispo auxiliar de Tegucigalpa evitó hablar de fechas para un acuerdo, pero aseguró que cada día se logra "algo concreto".
"Creo haber recibido hasta este momento nueve propuestas escritas y muchas verbales y entre todas ellas creo que se puede salvar muchísimo", dijo, al señalar que por el momento no hay ninguna que prime sobre otra.
Un grupo de empresarios encabezado por Adolfo Facussé anunció el martes una propuesta para que Zelaya fuera repuesto nominalmente, pero bajo arresto domiciliario, y mientras un Gabinete de ministros gobernase el país, a donde acudiría una "fuerza militar-policiaca de países amigos" que velaría por el cumplimiento del acuerdo.
"Todas (las propuestas) son absolutamente salvables, pero no creo que ninguna esté primando sobre otra", dijo el obispo, en referencia a las iniciativas, de las que evitó hablar, pero que, dijo, "no necesariamente" contemplan el regreso de Zelaya al poder.
Pineda criticó la postura "de algunas personas del actual Gobierno" de facto de dificultar las relaciones con otros países y organismos internacionales, y en ese sentido indicó que "la comunidad internacional debe ser bienvenida".
