Luis Oliver, a su llegada al Betis en 2010 / Javier Cuesta
La actualidad del Betis vuelve hoy a los juzgados. Luis Oliver está citado como imputado por su gestión durante 2010 y 2011, en unas diligencias separadas de las que investiga la jueza Mercedes Alaya contra su predecesor, Manuel Ruiz de Lopera. Oliver tiene que declarar ante el juez de refuerzo del Juzgado de Instrucción 6 de Sevilla, Rogelio Reyes, a las 9.30 de la mañana, mientras que a las 12.00 lo hará su empleada Isabel Escrig. Ahora bien, está por ver si Oliver se presenta, ya que el juzgado no había sido capaz de localizarlo hasta hace pocos días. Si se ausenta, el magistrado incluso podría declararlo en busca y captura, de ahí que la acusación piense que sí asistirá al juzgado. También existe la posibilidad de que el juez le dé una segunda oportunidad de acudir, claro está, aunque en casos tan mediáticos suele esquivarse esta opción.
Al empresario navarro, dueño de la sociedad Bitton Sport, se le imputan un presunto delito societario por su gestión al frente del Betis tras adquirir en julio de 2010, por 16 millones de euros, las acciones que le vendió Lopera.
Dentro de esta causa, el viernes 27 declararán otros dos trabajadores de Oliver, también como imputados; el 3 de octubre lo harán los expresidentes José León y Jaime Rodríguez Sacristán y entre los días 9, 10 y 14 acudirán otros cinco testigos. El propio Lopera está citado como imputado el 6 de noviembre y el exvicepresidente Ángel Martín, el día 18.
