El dispositivo especial puesto en marcha por la empresa de limpieza municipal (Lipasam) para retirar las más de 7.000 toneladas de basura acumuladas en Sevilla capital a causa de la huelga de 11 días que realizó la plantilla, que concluyó el jueves por la noche, había recogido hasta las 7.00 horas de ayer 1.726.060 kilogramos de residuos sólidos, según informaron fuentes municipales.
Para que la ciudad recupere su aspecto habitual lo antes posible, nada más desconvocarse la huelga se puso en marcha un dispositivo especial estructurado en tres turnos que operan a las 23.00 horas, las 7.00 horas y las 14.20 horas, que cuenta con 30 vehículos y cerca de 140 operarios por cada turno.
De estos 30 vehículos, 20 son recolectores de carga trasera y otros diez de carga lateral, auxiliados cada uno de ellos por cuatro y tres operarios respectivamente.
Según Lipasam, el “gasto extraordinario” de este dispositivo especial en concepto de horas extra y materiales mecánicos se elevará a aproximadamente 750.000 euros –incluye la reparación de los vehículos estropeados– y si la ciudad queda limpia en una semana, tal y como calculó el alcalde Juan Ignacio Zoido (PP). Cantidad a la que habrá que sumar otros aproximadamente 100.000 euros para reponer las papeleras y contenedores quemados a causa de los actos vandálicos. En cambio, la empresa se ahorrará 1.250.000 en los sueldos que descontará a la plantilla por los días que no han acudido a trabajar.
Aunque la limpieza de la ciudad se está realizando a marchas forzadas, el alcalde quiere que Sevilla recupere su buena imagen lo antes posible, lo cierto es que la feria va por barrios e incluso por tramos de calles.
La recogida se inició en los lugares más problemáticos y que pudiesen generar problemas de salud. Además, en estas primeras actuaciones se ha trabajado tanto en el centro como en barrios de la periferia. De hecho, en Pino Montano ya no se notan los efectos de la huelga, mientras que en la cercana avenida Manuel del Valle los contenedores siguen a rebosar de basura.
Algo similar ocurre en la zona de Nervión, en la calle Luis de Morales, a la altura del centro comercial Nervión Plaza, todo había vuelto a la normalidad y se veían a varios operarios limpiando con agua los contenedores, sin embargo, a la vuelta de la esquina, en Eduardo Dato, la basura seguía acumulada.
La zona de San Luis, Feria y El Pumarejo también los desperdicios continuaban acumulados en la calle, además con el agravante de que la noche del jueves al viernes se habían quemado numerosos contenedores. No obstante, ayer en la calle Feria ya comenzaron a llegar los camiones de Lipasam, pero, según comentaron algunos vecinos, el trabajo que queda por delante será largo, “porque hay montañas de basura”.
Poco a poco este plan de choque está dando sus frutos con la esperanza que todo esté limpio lo antes posible.
