El Cajasol regresó a Sevilla con una satisfacción doble. Sobresaliente rendimiento en el play off ante el campeón de la Eurocup que ha rematado una temporada excelente, que empezó con muchas dudas e incógnitas y ha acabado con el anhelo de que este equipo pueda tener continuidad el próximo año. Acabada la competición, es turno de fajarse en los despachos, y como sucedió en la pretemporada, son varias las incertidumbres sobre jugadores claves. Y lo más trascendente, saber las intenciones de CaixaBank, propietario del club, en el futuro a corto y medio plazo, es decir, si mantendrá el nivel de presupuesto o habrá de nuevo recortes, que han padecido todos los departamentos de la entidad. Lo cierto es que la imagen que ha dado el equipo y por extensión el club no ha podido ser más positivo y seguramente tendrá su peso en las decisiones que se deben tomar.
Fernando Moral, presidente del club desde el pasado 30 de octubre de 2013, aunque lleva en el consejo de administración de la entidad desde 2009, se expresaba ayer en esa línea de preservar las bases principales del equipo, comenzando por el maestro Aíto García Reneses, pieza angular de este Cajasol que ha recibido alabanzas desde todos los rincones del basket español.
«Estoy muy orgulloso, porque el equipo ha dado la cara, lo dio todo para sacar el último partido adelante, en una eliminatoria que era muy difícil con un equipo campeón de la Eurocup, y segundo sobrado de la liga regular. Y lo tuvimos ahí, estuvo al límite», dijo el presidente cajista en la estación de Santa Justa, a su llegada a Sevilla con el resto de la expedición. «El futuro del club se empieza a planificar a partir de mañana (por hoy), hablaremos con Caixa para ver cuál será la solución para la próxima temporada», dijo en un primer momento, aunque también avanzó que ya ha habido contactos con Aíto García Reneses. «Con Aíto ya hemos empezado a hablar. Él quiere ver el proyecto que tenemos para el año que viene, quiere que el club crezca, que mantengamos la estructura. Entiendo que le gustaría continuar con nosotros pero le preocupa que el club avance y en ese sentido estamos trabajando, en el crecimiento y en la permanencia del baloncesto en Sevilla».
Se le preguntó por las posibilidades de seguir contando con jugadores como Willy Hernangómez, que estaba junto a él en la conversación con los periodistas, o Tomas Satoransky. «Es un lujo tener a Willy, es un chico que está creciendo como persona y como jugador con nosotros, él sabe que lo aprecio, y me encantaría que se quedara. Intentaremos llegar a un acuerdo con el Madrid y que él esté contento con nosotros para quedarse».
El base checo es otra cuestión bien distinta. Tras cinco temporadas quiere dar un salto y ha rechazado las ofertas de renovación. «Es un gran jugador, le hemos visto crecer, y vuelvo a decir que es un lujo, una leyenda con ese récord de asistencias en la historia del club. Haremos todo lo que esté en nuestras manos para que se quede», dijo Moral, quien admitió que a Marcus Landry no le han hecho una oferta, que no significa descartarlo. Todo dependerá también de lo que ocurra con Aíto. Otra cuestión es si el club participará o no en la Eurocup después de haber conseguido la clasificación. «Hay que pensar en una globalidad, ver el punto de vista económico y el deportivo y si cuadra la jugaríamos. La intención del club inicialmente es jugarla. Creo que es bueno para este equipo joven», aclaró el presidente, quien tiene claro que tiene un diamante de equipo entre las manos. «La idea es mantener el mayor número de jugadores, porque con algo más de madurez se podrían hacer mejores cosas incluso. Intentaremos que el presupuesto sea parecido al de este año».
Decidir con tranquilidad. Tomas Satoransky ha sido el jugador franquicia del Cajasol. Ha impregnado al grupo con su espíritu competitivo, un líder al que se le va a echar de menos. «Estamos muy contentos por conseguir este reto que teníamos, hasta el final queríamos competir y en el último partido hemos enseñado que sabemos competir incluso con un gran equipo como Valencia Basket», decía sin dejar de sonreír. «No nos ponían en la tele, así que tampoco estaban tan pendientes de nosotros», bromeó cuando se le apuntaba la repercusión que ha tenido el play off del equipo. «Estoy contento con el rendimiento de mis compañeros, y también por la afición que estuvo allí con nosotros». «Al principio de temporada no soñaba ni con el play off, y al final hemos soñado con la semifinal. Es increíble. Podemos estar orgullosos» subrayaba. Y claro, la pregunta sobre su futuro: «No tengo muchas ganas de pensar si fue mi última canasta con el Caja. Ahora quiero descansar, despedirme de la temporada con el equipo y luego habrá un momento en el que tengo que tomar algunas decisiones con mi familia, con mi agente, tranquilamente. Ahora mismo estamos emocionados por todo lo que hemos hecho». «Esta es una temporada muy especial por la responsabilidad que tenía con este grupo. Lo voy a guardar mucho tiempo» y desveló lo que los técnicos le han dicho sobre su futuro: «me dicen que lo piense bien, que lo piense tranquilo y que piense en todas las posibilidades», incluida la de quedarse.
Una oportunidad. Willy Hernangómez, uno de los mejores jugadores del play off, también debe decidir destino. Su continuidad no parece tan difícil como la de Satoransky, pero influyen varias variables: la continuidad de Aíto, la decisión de su club, el Real Madrid, las ofertas que le lleguen... «Había mezcla de sentimientos, había rabia porque estuvimos cerca pero también satisfechos de todo lo que habíamos cosechado durante el año» dijo sobre la resolución del play off, donde ha culminado una temporada en la que, como el resto del equipo, ha ido de menos a más. «Poco a poco me he ido encontrando más cómodo en la pista. El juego de pies, jugar de espaldas, siempre me ha gustado. Durante la temporada no he podido hacerlo pero al final sí he tenido la confianza». «Escucharé todas las ofertas, y si el Madrid quiere que vuelva estará muy bien. Si voy cedido estar aquí en Sevilla es una opción muy buena. Estoy muy a gusto, conozco la ciudad y ojalá sea aquí otro año. Estar con Aíto para cualquier jugador joven es una oportunidad, todos los días aprendes algo, es un orgullo estar con él».
Aíto dio la cena libre a los jugadores tras el partido en Valencia, pero no había muchas ganas de fiesta. La mayoría de los jugadores prefirieron quedarse en el hotel. También la salida para coger el tren estaba fijada a las 7 de la mañana pero sobre todo hubo no pocos jugadores dolidos por perder un partido en el que vieron las semifinales muy cerca.
En el vestuario tenían la sensación de que si hubiesen forzado la prórroga no se les escapa, porque veían a los jugadores de Valencia, como se suele decir, tiesos.
