El ex portavoz de Batasuna Arnaldo Otegi entró en el Palacio de Justicia de Bilbao entre gritos de "Batasuna Aurrera" coreados por simpatizantes de la izquierda abertzale congregados en la entrada de la sede judicial.
El ex dirigente de la formación ilegalizada llegó hasta la sede del alto Tribunal vasco acompañado de su abogada, Jone Gorizelaia. Ante la entrada, cientos de personas, entre las que se encontraban el histórico dirigente de HB Tasio Erkizia, la secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, el ex dirigente de la central abertzale Rafa Díez, la dirigente de ANV Arantza Urkaregi y el ex representante de Batasuna Julen Aginako, la parlamentaria de EHAK Nekane Erauskin o el abogado Iñaki Goioaga, corearon gritos de 'Euskal Herria Aurrera'.
Los otro cuatro acusados de la izquierda abertzale, Olatz Dañobeitia, Pernando Barrena, Juan José Petrikorena y Rufi Etexeberria, fueron conducidos al Palacio de Justicia desde las cárceles de Nanclares y Basauri, a las que fueron trasladados, previamente, con motivo de la celebración del juicio y serán los últimos en entrar en la sala y ocupar el banquillo de los acusados.
Al término de la sesión, Otegi, calificó de "esperpéntico" el juicio y afirmó que lo que "se sienta en el banquillo" es el proceso de negociación política y la Ley de Partidos. El representante de la izquierda abertzale, tras calificar de "esperpéntica" la situación, reiteró que "se sientan en el banquillo de los imputados y los acusados quienes hicieron la Ley de Partidos, quienes dicen que están en contra de la Ley pero se aprovechan de ella en términos electorales y políticos y quienes hemos sufrido en primera persona esta Ley de Partidos".
Asimismo, el representante de la izquierda abertzale manifestó a la salida de la vista que se pretende "criminalizar el diálogo y la negociación política". "Lo que está también en el banquillo es la Ley de Partidos en el juicio es "el proceso de negociación política y de diálogo político", criticó.
