Paula nació con prisas

Una peluquera de Villanueva del Ariscal da a luz en su propia casa a su hija, con la única ayuda de su marido y una vecina y las indicaciones telefónicas del servicio de emergencias sanitarias.

el 23 sep 2013 / 16:27 h.

paula villanueva ariscalNo tenía ganas de esperar y decidió ver la luz en su propia casa. Paula, con tan solo unas horas de vida, se ha convertido de la noche a la mañana en el centro de atención de sus padres y de todo el pueblo de Villanueva del Ariscal que fue testigo de su nacimiento la madrugada de este lunes. Eran las cuatro y media de la mañana cuando María Jesús empezó a notar los dolores del parto, aunque lo que menos pudo imaginar en ese momento es que la cabeza de su pequeña ya asomaba y que no había tiempo ni de pensar, había que actuar. Fue entonces cuando el padre, José Manuel García, llamó al teléfono de emergencias 112, quienes ante la inminencia del parto, fueron guiando sus pasos para conseguir un final feliz, como al final así fue al filo de las cinco de la mañana. “Nació con prisas”, relataba su padre, un mecánico de 31 años de esta localidad que no se lo pensó dos veces cuando su mujer se puso de parto en su propia casa. “En media hora mi pequeña ya tenía toda la cabeza fuera y no dio tiempo a nada”, explica aún nervioso José Manuel que recordaba también la crucial ayuda de su vecina Ana que tras los primeros gritos de la madre acudió rauda y veliz a la hora de echar una mano. María Jesús posaba ayer así de contenta con Paula. / J. M. Paisano (Atese) María Jesús posaba ayer así de contenta con Paula. / J. M. Paisano (Atese) La pareja formada por José Manuel y su mujer, María Jesús, de 30 años y peluquera de profesión, daban tras el susto inicial y muchas indicaciones telefónicas del servicio de emergencias la bienvenida a su hija al filo de las cinco de la mañana entre nervios e ilusión. “Gracias a dios salió todo bien, aunque hay miles de cosas que se te pasan por la mente en ese momento”, comentaba este padre que recuerda que fue en el preciso instante en el que vio el rostro de su pequeña, que pesó 3,190 kilos y midió 49 centímetros, cuando dejó de atender a las explicaciones de lo sanitarios y “ya no me acuerdo de nada más, sólo sé que giré su cabecita y tras nacer la puse en los brazos de mi mujer”, quien ya ha sido pasada a planta del Hospital de la Mujer del Virgen del Rocío junto a su hija. “Mi mujer está muy agradecida tanto a mi como a mi vecina y todos los que han hecho posible que nazca mi hija sana”. Paula es la segunda hija de esta pareja de Villanueva del Ariscal, quienes ya tienen otro bebé de 28 meses que se llama Marta, otra heroína de esta historia con final feliz, ya que tras despertarse por los gritos de su madre, y a pesar de su corta edad, tuvo la suficiente inteligencia como para quedarse quieta y callada durante todo el parto. Tras el alumbramiento llegaron dos ambulancias del equipo sanitario de Sanlúcar la Mayor y el 061, quienes fueron los que cortaron el cordón umbilical a la recién nacida, la limpiaron y atendieron a la madre hasta su posterior traslado al hospital, donde ambas se encuentran bien de salud. “Es la primera vez que me pasa esto en la vida”, destaca un padre aún emocionado que seguro dentro de unos años le contará a Paula que fue él quien la ayudó a nacer.

  • 1