La defensa fue uno de los puntos débiles del Betis durante buena parte de la temporada y por tanto es una de las parcelas que Pepe Mel y la dirección deportiva quieren reforzar para la próxima temporada. El problema es de todos conocido: "A golpe de talonario no podemos salir al mercado, es impensable", recordó ayer el consejero José Antonio Bosch. Así pues, el club verdiblanco busca futbolistas poco conocidos, baratos, cedidos o, simplemente, sin contrato. Y en ese último perfil, el de jugador libre a partir del 30 de junio, entra el colombiano Luis Amaranto Perea, que no renovará su vinculación con el Atlético de Madrid después de ocho temporadas al servicio de la causa colchonera y suena ahora para el Betis.
El interés por Perea promete generar una buena dosis de controversia. Los aficionados del Atlético le habrán visto partidos mejores y partidos peores, pero lo que queda de puertas del Calderón hacia fuera, para el común de los aficionados, es un repertorio de errores y meteduras de pata, lo que vulgarmente se conoce como cantadas, para confeccionar un programa entero. En todo caso, Perea ha jugado 224 encuentros de Liga con la camiseta rojiblanca y es el futbolista no español que más veces la ha vestido en toda la historia, así que cosas peores hábranse visto.
Perea sería un fichaje no demasiado costoso, ya que no hay que pagar traspaso alguno, y supondría la llegada de un hombre que conoce el fútbol español y la Primera División como la palma de su mano. Pero desde luego no sería mimbre ninguno para un proyecto de futuro, ya que el central colombiano cumplió 33 años a finales de enero. También se trata de un profesional de gran regularidad, ya que su media de encuentros en estas ocho campañas en el Atlético ronda los treinta por campeonato. Precisamente la Liga que concluye este fin de semana ha sido la de menos participación por su parte: 19 partidos. Otra de sus virtudes: la polivalencia, que lo ha llevado a jugar incluso de lateral por ambos flancos.
Fue en el verano de 2004 cuando Perea aterrizó en el Calderón. Procedía de Boca Juniors, con el que llegó a disputar un amistoso en Heliópolis, y antes había sido campeón de la liga colombiana con el Independiente de Medellín. También ganó la liga argentina, así como la Libertadores y la Intercontinental, y sólo le va a faltar la Liga española, aunque como colchonero puede presumir de tres títulos: dos de la Liga Europa, el último este pasado miércoles, y uno de la Supercopa de Europa. Ayer fue uno de los protagonistas en la celebración atlética por las calles de Madrid, aunque su despedida como rojiblanco tendrá lugar en su país, a donde se va el equipo de gira la próxima semana.
EL-SHENAWY, CON EL PRIMER EQUIPO. El guardameta egipcio Ahmed El-Shenawy, mientras tanto, cumplimentó este jueves su segundo día de prueba con el Betis, pero no trabajó con el filial sino con el primer equipo, es decir, a las órdenes de Pepe Mel y José Ramón Esnaola. En principio parece difícil que se quede, pero es una gestión del agente de Paulao, al que sí quiere el Betis, así que todo es posible.
