El fiscal ha pedido dos multas, una de 180 euros y otra de 36, para los dos jóvenes acusados de desorden público por interrumpir el discurso del presidente de la Junta, Manuel Chaves, durante la entrega de las medallas de Andalucía el pasado 28 de febrero, informó ayer Efe.
Los acusados pretendían llamar la atención sobre el problema de los vecinos del barrio de Begoña, que denuncian estar amenazados por desalojo y acosados por la especulación en edificios en los que algunos viven desde hace 35 años, y por los que pagan "religiosamente" su alquiler, según informó ayer el abogado de la defensa.
Durante el juicio celebrado, una de las acusadas explicó que fueron invitados al acto por pertenecer a la Confederación General del Trabajo (CGT), y que acudieron sin intención de interrumpir el discurso, ya que únicamente pretendían desplegar en silencio una "pequeña pancarta" de denuncia por la situación de los habitantes del barrio de Begoña.
Pero, el presidente de la Junta se dirigió a ellos, según su versión, y mantuvieron una pequeña conversación, tras la que comenzaron a gritar, momento en el que los policías acudieron para desalojarlos. El segundo acusado no ha acudido al juicio.
Uno de los policías que intervino en el desalojo de los jóvenes ha asegurado que los acusados no opusieron resistencia ni reaccionaron con violencia, y ha destacado que no oyeron insultos ni expresiones vejatorias.
