Se hará de rogar, pero lo importante es que habrá Ciclo de Música de Cámara. Y además, mantendrá su elevado nivel -había serias dudas dada la dura realidad económica que atravesamos todos, cajas de ahorro incluidas-, aunque haya que sacrificar algunos conciertos para ello.

Así lo ha anunciado el director del Centro Cultural Cajasol, Antonio Cáceres, en una misiva a los abonados al ciclo, en la que explica que "por diversas razones, se ha decidido posponer el inicio del ciclo a enero, haciéndolo coincidir con el año natural".

Eso sí, Cáceres puntualiza que "la calidad de los conciertos se mantiene en el mismo nivel, si bien el número se reduce a once". Y a juzgar por el programa, hay que reconocer que el cartel está a la altura.

El ciclo arrancará el 12 de enero con Sol Gabetta Trío y su repertorio con obras de Schummann. El 9 de febrero, el pianista Javier Perianes rendirá tributo también a Schummann y Chopin (de aniversario), si bien también interpretará a Schubert.

El 23 de febrero llegará el turno del Leopold String Trío con piano, y el 8 de marzo sonará la celebrada clave de Trevor Pinock.

El 16 de marzo se evocará de nuevo a Schunert de la mano del Cuarteto Brentano, y el 13 de abril más de lo mismo (junto a obras de Brahmns y Mendelssohn) por el Cuarteto Fauré. El 11 de mayo llegará otro plato principal con el Cuarteto Vogler.

Y hasta el 26 de octubre, parón. Ese día llegan Barnabás Keleman y Zoltan Kocsis, dos grandes. El 16 de noviembre, el Cuarteto Casals, y el 29 Emmanuel Ax con su piano. Cerrará el ciclo el 14 de diciembre el cellista Steven Isserlis.