La crisis en que sufre la cooperativa de la pedanía de Pinzón será abordada a comienzos de la próxima semana. Para entonces, está prevista una reunión en la que participarán el delegado provincial de Empleo, Antonio Rivas, su homólogo en Agricultura, Francisco Gallardo, y representantes de los trabajadores, además del sindicato UGT.
Mientras tanto, ayer se produjo otro encuentro entre las partes implicadas, salvo el delegado provincial de Agricultura, donde se informó de la situación actual que padece la empresa. El gerente de la cooperativa, Manuel Melendo, explicó que "parte de la plantilla está dentro de un expediente de regulación de empleo que terminó el pasado 1 de junio, y que se intentó ampliar por un año".
Sin embargo, como la cooperativa entró en ese mismo periodo en un concurso de acreedores, la toma de decisiones sobre el expediente de regulación de empleo pasó de la Junta de Andalucía a un juez. En estos instantes, están a la espera de la decisión del juez, situación en la que se encuentran desde hace más de un mes. Dicho expediente de regulación de empleo afecta a 20 empleados de la factoría, de la treintena que componen la plantilla.
El gerente expuso que "la cooperativa está funcionando, pero el nivel de trabajo que se genera no es suficiente para todos" los empleados. "El volumen de trabajo, debido a la sequía que estamos padeciendo, y que nos ha impedido sembrar cultivos de tomate -que es el que da mayor trabajo, al tener la fábrica de concentrado de tomate- ha provocado que no podamos darle trabajo a todos los empleados", lamentó.
Encuentro . En la reunión de la próxima semana, los miembros de la cooperativa esperan poder encontrar una solución al asunto. En este sentido, el gerente afirmó que "los trabajadores piden que la resolución del juez sea con carácter retroactivo, es decir, que cobren desde el pasado 1 de junio, y no desde la fecha de la resolución, para que no pierdan prestación del tiempo que pudieron trabajar".
Él mostró su confianza en que así ocurra, "porque se trata de una situación de causa mayor provocada por la falta de actividad como consecuencia de la carencia de agua". En su opinión, si el juez no autoriza el carácter retroactivo, la situación que se puede contemplar es complicada, porque la cooperativa "no genera trabajo para tantos empleados". Si, finalmente, la factoría tuviera que asumir dicha resolución, entrarían, según él, "en una situación difícil".
Otras de las causas de la crisis están en la gran inversión efectuada para la construcción de la fábrica de transformación de tomate. Sobre la situación de la cooperativa, el Ayuntamiento de Utrera aprobó en un pleno una moción de apoyo a los trabajadores.
