La plataforma Podemos, que no existía en las elecciones europeas de hace cinco años (ni existía hace un año), irrumpió ayer en el panorama político andaluz con una fuerza inusual, mayor que la que experimentó UPyD en las autonómicas de 2012, donde a punto estuvo de lograr representación parlamentaria. Sus apoyos aglutinan el 7,11%, frente al 7,13% que ha logrado el partido de Rosa Díez en su segunda convocatoria europea. Si fueran extrapolables los resultados de ayer a unas andaluzas, el partido de Pablo Iglesias obtendría escaño en el Parlamento autonómico. Podemos, restando apoyos al PSOE e IU, se ha erigido como cuarta fuerza política en cuatro de las ocho provincias andaluzas, desbancando a UPyD. Cádiz es la circunscripción donde más votos ha obtenido Podemos (un 10,07%), seguida de Sevilla, donde han sumado el 7,82% de apoyos, convirtiéndose incluso en tercer grupo político en la capital, por delante de IU (que hasta hace tres años era fuerza de Gobierno con el PSOE). Las otras dos provincias con más respaldo han sido Huelva (6,29%) y Almería (5,63%). Únicamente en Jaén se han quedado por debajo de la franja del 5%, necesaria para lograr representación parlamentaria en una hipotética extrapolación andaluza. En algunos países europeos, como Francia u Holanda, la pérdida de votos del bipartidismo ha supuesto el ascenso de grupos antieuropeistas, xenófobos o antisistemas. Aquí, en España, en Andalucía, han sido los nuevos partidos extraparlamentarios quienes se han beneficiado del hartazgo de la ciudadanía con las grandes fuerzas que gobiernan en Bruselas, en Madrid o en Sevilla. UPyD, liderado en Andalucía por el abogado Martín de la Herrán, se consolida como cuarta fuerza en Córdoba, Málaga, Jaén y Granada. Herrán interpretó ayer el resultado de su partido como un golpe mortal al bipartidismo. Suya es la primera iniciativa popular registrada en el Parlamento, a través del escaño 110, para aprobar una nueva ley electoral que haga la Cámara más plural. Entre los minoritarios, cabe destacar el desplome rotundo del PA, un fuerza que llegó a cogobernar con el PSOE en Andalucía, y que ayer recabó menos votos que Ciudadanos, un partido catalán contrario a los nacionalismos. Los andalucistas obtuvieron el 1,69% de votos, mejor que su marca en 2009 (1,01%).