Menú

Los partidos relevan a Chamizo como Defensor tras 17 años en el cargo

El Gobierno pacta con PP, PSOE e IU y señalarán al sucesor el lunes en una negociación muy avanzada. “La chica que está en Presidencia y un psicópata del PP han decidido que tenía que irme”, dijo el Defensor

el 22 may 2013 / 14:45 h.

Dos horas después de que los partidos y el Gobierno andaluz llegaran a un acuerdo exprés y unánime en el Parlamento para renovar a José Chamizo, al que ha sido 17 años Defensor del Pueblo andaluz todavía no le había llamado nadie. Así lo confirmó él mismo a este periódico, sin ocultar su indignación y confesándose a la espera de que lo telefoneara el presidente del Parlamento, Manuel Gracia, para comunicarle los términos de un relevo que se consumará en pocos días y que tendrá sucesor el lunes. El desenlace es sintomático de lo que ha ocurrido con elDefensor en el último año. En marzo de 2012 Chamizo cumplía tres mandatos y su cargo tenía fecha de caducidad. Desde entonces, su renovación se ha enquistado. Los partidos ni siquiera se habían sentado para hablar en serio hasta que ayer se citaron en el Parlamento y dieron por cerrado que el actual Defensor no seguirá en un cargo al que accedió en 1996. Curiosamente el otro asunto sobre esa mesa, la designación del director de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA), quedó aplazado sin fecha. La prioridad, confesaron, era relevar a Chamizo. El Partido Popular ya había dejado claro que no iba a apoyar su renovación, los socialistas daban cada vez más muestras de desentendimiento con el Defensor y solo Izquierda Unida había llegado a apoyar su continuidad. Chamizo sabía que estaba de salida y había elevado el tono: “Les molesta que esté dando por saco todo el día”, dijo el martes. Antes no había perdido oportunidad para reprochar a los partidos que estén “todo el día en la peleíta” o para advertir de que deberían reflexionar porque “la gente anda un poco enloquecida con la crisis”. Ayer no mostró sorpresa. “Lo esperaba, la chica que está en Presidencia [en referencia a la consejera Susana Díaz] tenía mucho interés en que me fuera”, declaró a El Correo, convencido de que “los políticos cada vez aceptan menos la crítica” y censurando que el Gobierno cada vez dé “menos respuestas a los problemas de la ciudadanía denunciados por esta oficina”, dijo a este periódico. “A mí lo que me preocupan son los desahucios, los niños que no tienen para comer y que no se pague a los dependientes”, agregó. “Son dos mundos distintos, yo tengo la ventaja de que la gente me quiere y a ellos cada vez los quiere menos gente”, sostuvo, agradecido porque haya plataformas en internet a favor de su renovación. “La chica que está en Presidencia y un psicópata del PP decidieron que yo tenía que irme”, insistió ayer en la SER. Desde los partidos, las palabras entraron en lo políticamente correcto. Todos los portavoces y Díaz alabaron su dedicación y su trayectoria, incluso el sello que Chamizo –un controvertido sacerdote al que sus detractores le reprochan gustos caros que chocan con su discurso obrero del lado de los más desfavorecidos– ha dejado en la institución andaluza. Habrá una reforma de la ley del Defensor y se aligerará su estructura en aras de la austeridad, defendieron PSOE y PP. En lugar de cuatro adjuntos habrá tres. Eso sí, lo suficiente para que cada partido pueda designar un cargo. El nombre del futuro Defensor, hombre o mujer, se conocerá el lunes y los partidos han quedado en intercambiar propuestas el fin de semana. Ayer solo hablaron de perfiles. El portavoz de IU, José Antonio Castro, reclamó que sea alguien que no milite en ningún partido. El socialista Mario Jiménez no fue tan claro, dijo que no es bueno negociar sobre “apriorismos”, pero concluyó como IU que el modelo del Defensor que desempeña la exalcaldesa popular Soledad Becerril no les gusta. Carlos Rojas (PP) reclamó “no poner puertas”. La seguridad con la que dieron por hecho que habrá un nombre el lunes indica que la negociación está muy avanzada. Posiblemente si el PP acepta retrasar la renovación de la RTVA, serán ellos quiénes más tengan que decir en el futuro Defensor.

  • 1