El Tribunal Supremo ha confirmado las condenas de cinco meses de prisión e inhabilitación a dos policías nacionales que fracturaron varios huesos de la mano y el cúbito a un detenido, en noviembre de 2005 en una comisaría de Algeciras (Cádiz), al que deberán pagar también una indemnización de 10.000 euros.
La sentencia desestima el recurso interpuesto por los agentes contra el fallo dictado por la Audiencia de Cádiz en mayo de 2009, que condenó a ambos por un delito de lesiones con la atenuante de dilaciones indebidas.
Los hechos se remontan al 24 de noviembre de 2005 cuando los policías realizaban un servicio de detección de coches robados y arrestaron a un hombre al escuchar que había golpeado un turismo. En ese momento se produjo un altercado entre los agentes y el detenido, por el que este último fue condenado por un delito de atentado. Cuando el arrestado entraba en la comisaría se abalanzó contra los policías y cayó, junto a un agente, por las escaleras, si bien el juez estima que los agentes emplearon después "fuerza excesiva para reducir al detenido". Como consecuencia de la caída y de la posterior actuación de los policías, el arrestado sufrió contusiones en manos y antebrazos, numerosas erosiones y fracturas en la mano y el cúbito izquierdos.
El Supremo no considera relevante determinar cuál de los dos agentes "ejecutó los actos agresivos mientras que el otro vigilaba o aseguraba la acción de su compañero, puesto que ambos han actuado como coautores". Respecto a la inhabilitación de los policías, afirma que es una medida proporcionada "atendiendo a la gravedad de los hechos" a la que se suma que se produjo en dependencias policiales y con la víctima ya detenida.
