Dos puntos de quince. Es la triste realidad numérica que en estos momentos presenta el Betis. Conviene ir obteniendo ya el primer triunfo de la temporada, aunque la buena imagen a ráfagas que ofrece el equipo invita al optimismo. Los precedentes, no tanto.
El debate está en la calle. El Betis es un equipo en formación que ha tenido la desgracia de enfrentarse a un calendario diabólico. Además, ha ofrecido a ráfagas un más que aceptable juego contra los mejores equipos del Campeonato. Todo eso contando con el buen nivel que han mostrado los fichajes y el hecho de que un jugador fundamental como Edu no ha podido aún debutar. Son los argumentos a favor que tiene Francisco Chaparro y su cuerpo técnico, además del conocimiento del entorno y un club muy peculiares.
En contra del trianero se encuentra la realidad de los números. El Betis ocupa plaza de descenso porque sólo ha sido capaz de obtener 2 puntos de 15 en juego, en un arranque peor que el de Javier Irureta e idéntico al del año pasado, con Héctor Cúper en el banquillo. No hay técnico que aguante la tiranía de los malos resultados, pero por el momento la intranquilidad no ha llegado a las altas esferas del club. Eso sí, se discutieron el pasado sábado en el palco algunas de las decisiones tácticas del trianero, pero se es consciente de que el equipo está vivo y no presenta la ausencia de constantes vitales del bloque dirigido por Cúper.
Eso sí, urge ya lograr el primer triunfo de la temporada para evitar la intranquilidad, puesto que si no se consiguen los tres puntos en Villarreal, el choque ante el Mallorca sería ya una auténtica final. No es la primera vez, desgraciadamente, que el Betis supera la quinta jornada de Liga con tan sólo dos puntos. De hecho, hasta en nueve ocasiones a lo largo de la historia en Primera se dio esta circunstancia, incluso en tres de ellas con menos puntos. Y de esas nueve veces bajó a Segunda en seis (un 66% del total), por lo que conviene no jugar con fuego y sumar puntos cuanto antes.
Esos arranques. Lo que sí es llamativo es que el Betis lleva cinco temporadas consecutivas acumulando unos negativos inicios de Liga. Incluso en la campaña 2004/05, que acabó con el título de Copa y la clasificación para la Liga de Campeones, el Betis tenía a estas alturas tan sólo 5 puntos. Debe existir ahora la misma tranquilidad de entonces para que el equipo comience a remontar posiciones para instalarse en zonas más nobles de la tabla. La reacción puede comenzar en Villarreal. Después del parón liguero es una obligación.
