Si hay un día en el que el tráfico en Sevilla puede estar en jaque, ése día es hoy: las avenidas Bueno Monreal e Isabel la Católica se cierran al tráfico para un año por el inicio de obras –un paso soterrado en el primer caso; la peatonalización, en el segundo–, el taxi hace una jornada de huelga –salen a las 10.00 de Santa Justa hacia Plaza Nueva–, en Triana llegará la primera prueba de fuego del plan de tráfico tras el cambio de sentido de diversas vías –como Castilla y San Vicente de Paúl– y la peatonalización de San Jacinto... Y, por si no fuera suficiente, la Agencia Estatal de Meteorología, prevé que todo esto suceda bajo un manto de agua y vientos de más de 30 kilómetros por hora.
La acción de mayor envergadura es el cierre al tráfico de Bueno Monreal, una de las vías de acceso más importantes a Sevilla desde el Aljarafe –a través del puente de las Delicias–. Eso sí, para intentar aliviar la que se viene encima hoy la dirección facultativa de la obra solicitó anoche que el corte se retrase hasta las 16.00 horas, para que así haya pasado el grueso del temporal y la intensidad del tráfico haya disminuido al reducirse los flujos laborales y, sobre todo, escolar.
Se cortará el tramo entre Las Razas y Tabladilla y permanecerá cerrado hasta octubre o noviembre de 2010, mientras dure la ejecución de las obras del paso subterráneo bajo La Palmera. El cierre al tráfico afecta a los cruces con la avenida de Las Razas, La Palmera y Manuel Siurot.
Esta medida proporcionará en este acceso cuatro carriles más, dos por cada sentido. A éstos se unirán los seis carriles en superficie, tres para cada sentido, de que dispone actualmente Bueno Monreal. La Avenida de la Palmera, Manuel Siurot y Tabladilla no se cortarán al tráfico en ningún momento de las diferentes fases de la obra, como las vías de acceso para llegar al hospital Virgen del Rocío.
Plaza de España. A escasos metros se producirá otro cierre. El de Isabel la Católica, entre la Plaza de España y el parque de María Luisa. El objetivo del proyecto es “recuperar la avenida para los peatones e integrar la plaza con el parque acompasando la actuación al resto de la intervención para que todo el conjunto esté listo a finales de 2010”, detalló ayer el Ayuntamiento.
Esta vía, según el Consistorio, “pasa desapercibida al estar absorbida y deteriorada por los vehículos”. A partir de hoy “un bulevar ajardinado sustituirá lo que ahora es un enorme aparcamiento de coches. Precisamente, una de las incógnitas que se ciernen sobre esta zona es dónde se reubicarán los cientos de vehículos que aparcan diariamente en este entorno.
La protesta de los taxistas, de hecho, estaba previsto que pasara por esa zona, y por ello el sector acordó, tras una reunión con la Subdelegación del Gobierno, limitar el recorrido. Los taxistas saldrán a las 10.00 horas de Santa Justa y seguirán este itinerario: Pablo Iglesias, José Antonio Cavestany, Luis Montoto, Puerta Carmona, Menéndez y Pelayo, Avenida de María Luisa, Juan de Austria, Delicias, Paseo Colón, Reyes Católicos y Plaza Nueva.
Según explicó a Europa Press el presidente de Unión Sevillana del Taxi, Fernando Morales, una vez frente al Ayuntamiento, harán entrega de un nuevo escrito como “recordatorio” de sus reivindicaciones e iniciarán la ruta de retorno por Méndez Núñez, Canalejas, Torneo, Ronda Histórica hasta llegar a Santa Justa “sobre la hora de comer”. Además de ésta, tienen previstas otras protestas para enero.
Entre otras cosas, el sector reclama la prórroga del II Plan de Modernización y el cumplimiento de la totalidad del plan, lo que en la práctica implica la retirada de las 25 licencias pendientes. Junto a esto, solicita el cierre “total” de las contrataciones de vehículos a doble turno, “excepto para titulares en situación de incapacidad temporal, viudas y jubilados, tal y como se viene haciendo hasta ahora”, según indicó Fernando Morales.
La atención en torno al tráfico se traslada también a Triana, que hoy vive el primer día laborable después de que el pasado sábado se pusiera en marcha el plan de tráfico en el barrio.El estreno de la medida ya se vivió con confusión y desorden entre los peatones y los vehículos, sobre todo en el cruce entre la calle Castilla –que ha cambiado de sentido– y la Plaza del Altozano, así como en la intersección entre López de Gomara y San Jacinto, puesto que esta última calle, a la altura de Pagés del Corro, se hace peatonal.