Diego López e Iker Casillas
Diego López ha desbancado de la titularidad a Iker Casillas en el Madrid, pues pese a que el campeón del mundo ya está recuperado de su lesión José Mourinho prefiere mantener al espigado meta gallego (1.95) bajo los palos en la trascendental cita de Champions contra el Galatasaray. En la capital de españa la decisón de Mourinho ha causado la lógica conmoción, pues Casillas es considerado por muchos el mejor portero del mundo y uno de los mejores de todos los tiempos. En Sevilla, cuando menos, causa extrañeza, pues Diego López pasó por aquí con más pena que gloria y hace apenas dos meses era impensable que ocurriera lo que estamos viendo hoy.
Pero el fútbol tiene estas cosas, y Diego López, que aquí perdió la titularidad en beneficio del veteranísimo Palop, se la ha ganado en Madrid al mismísimo Casillas gracias a sus últimas buenas intervenciones -también tuvo algunos errores sonados en sus primeros partidos- y, sobre todo, a la complicidad de Mourinho, que ha encontrado en él al aliado perfecto para restar protagonismo al capitán madridista, con el que no no guarda buena relación.
La verdad es que el rendimiento de Diego López en el Madrid nada tiene que ver con el que ha ofrecido esta misma temporada en el Sevilla. Y la comparativa de datos que acompaña esta información es bien elocuente.
Diego López ya ha jugado con el Madrid exactamente el mismo número de partidos que con el Sevilla, ocho, Pues bien: con los merengues ha hecho 27 paradas, más del doble de las que realizó con el Sevilla, 13, con el que pese a que le remataron mucho menos entre los tres palos encajó más goles (11) que con el Madrid (8). De madridista se le contabilizan también el triple de despejes (6), de los que realizó la elástica sevillista (2),
Eso sí, aquí dejó dos veces su puerta a cero y en el Madrid solo una pese a los numerosos elogios que le ha dedicado Mourinho, que no tuvo ninguno con Casillas pese a que dejó la puerta a cero en ocho ocasiones en esta liga. "Para eso están los porteros" se limitaba a decir cuando le preguntaban.
