La Guardia Civil detuvo hace unos días en Alcalá del Río a un individuo de 43 años, cuyas iniciales son D.N.C., por quemar su ciclomotor y rociar con gasolina a dos agentes que lo iban a denunciar por no llevar encima ni documentación ni casco.
El infractor se encontraba en una gasolinera y fue detectado por una patrulla de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil que le pidió la documentación. Después de que los agentes de la Benemérita le comunicaran que el vehículo iba a ser inmovilizado por los citados incumplimientos, el infractor alejó la motocicleta unos 15 metros del surtidor y le prendió fuego, según informó ayer el Instituto Armado en un comunicado remitido a este diario.
Los agentes inmediatamente, ante el peligro que suponía el incendio en la gasolinera, se dedicaron a apagar el fuego, lo que trató de impedir el dueño del ciclomotor arrojando gasolina sobre ellos. Los guardias civiles finalmente consiguieron arrebatarle la botella de gasolina que portaba y apagar el fuego con ayuda de una patrulla de la Policía Local que llegó al lugar de los hechos en esos momentos.
El sujeto fue finalmente detenido entonces por los supuestos delitos de estragos, mediante fuego, y atentado contra agente de la autoridad.
Los guardias civiles sufrieron una leve intoxicación de la que fueron atendidos en un ambulatorio de este municipio de la Vega. No obstante, su estado no reviste gravedad, ya que el individuo no consiguió prenderles fuego y los agentes no resultaron heridos con quemaduras. Mientras, el detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Guardia de Sevilla, sin que trascendiera la decisión que éste adoptó para él.
