En la recta final antes de la elección del director de la RTVA por el Parlamento, el actual responsable de la cadena pública, Rafael Camacho, salió ayer al paso de las críticas del PP por la falta de neutralidad en la cobertura de la campaña del 9 de marzo. Aseguró que "ninguna instancia ha acreditado que haya habido manipulación", ya que aún "no están resueltos" los expedientes que abrieron las Juntas Electorales a Canal Sur.
Camacho, que compareció en el Parlamento de Andalucía a petición del PP, achacó los toques de atención que los órganos de control dieron al ente público a "fallos técnicos". El diputado popular José Luis Rodríguez fue muy claro y le preguntó directamente: "¿Qué hace usted todavía aquí?". "Si tuviera dignidad se habría ido", añadió. Rodríguez culpó a Camacho de "no haber cumplido la ley, no jugar limpio y hacer trampas en las elecciones". Es más, llegó a llamarle "cacique" y "comisario político al servicio de quien le nombró a dedo".
El director general de la RTVA presumió de que la cobertura de los pasados comicios generales y andaluces contó con "un despliegue humano y técnico sin precedentes" y que "servirá de modelo" para el futuro. Acudió a la Cámara para hablar de los recursos interpuestos por la oposición "en su mayoría desestimados" por la Junta Electoral andaluza y central. Los que fueron admitidos se referían, explicó, a "fallos técnicos fortuitos". "No ha habido sanción, a pesar de los esfuerzos de algunos por sostener lo contrario", defendió. Estos organismos, a raíz de recursos del PP, cuestionaron, en algún caso abriendo expediente sancionador, el tratamiento que Canal Sur hizo del inicio de la campaña; en relación con una información sobre detención de empresarios durante la cual sonó la sintonía del PP, y sobre las declaraciones de la diputada del PP Ana Mato sobre el analfabetismo en Andalucía.
Rodríguez recordó que el llamamiento de las Juntas Electorales derivó en un informe del Consejo Audiovisual muy crítico con la RTVA. "Demasiado caro lo ha pagado su presidente", dijo por la dimisión de Manuel Ángel Vázquez Medel. Camacho desautorizó al Audiovisual porque "no se puede admitir que este órgano copiara, sin un análisis propio, un acuerdo de otra instancia para tomar una resolución".
