Tal y como se preveía, el PP le está sacando todo el jugo político posible al Congreso Internacional de Víctimas. Si el martes fue Aznar el que aprovechó en este foro para criticar a Zapatero, ayer fue el presidente del PP, Mariano Rajoy, el que hizo campaña y arremetió contra el Gobierno.
Rajoy, por ejemplo, acusó al Gobierno de haber "jugado con la ley" y haberla utilizado "a su libre albedrío" con la ilegalización del PCTV y ANV, y recalcó que "la ética y la verdad, y no los enjuagues y los falsos atajos" acabarán con el terrorismo. El líder del PP intervino ante el IV Congreso Internacional de las Víctimas del Terrorismo, donde reiteró su compromiso, si es elegido presidente, de recomponer el consenso con el PSOE en la lucha antiterrorista.
El presidente del PP aprovechó su intervención para, entre constantes aplausos de los asistentes, criticar duramente la política antiterrorista del Gobierno, hacer hincapié en que es necesario que se "restablezca el prestigio y la fortaleza de la ley" y pedir a las víctimas que, "por triste y duro que haya sido", olviden el pasado.
También anunció que promoverá una declaración institucional del Congreso que proclame la "voluntad inequívoca de la democracia de que no existirá en el futuro ninguna negociación con ETA". Y garantizó que, con él en la Presidencia del Ejecutivo, ANV o el PCTV no volverán a estar en las instituciones "hasta que ETA no se disuelva y termine con su actividad criminal".
La intervención de Rajoy fue presentada por el director de este Congreso, Cayetano González, quien explicó que la organización invitó especialmente a los dos políticos con posibilidad de ser elegidos presidentes del Gobierno el 9 de marzo, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy, y llamó la atención sobre "quién ha aceptado venir y quién ha declinado la invitación".
Argumentos. En este sentido, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, contestó que el Gobierno no participó en el acto porque sería "una hipocresía" por su parte "acudir allí precisamente donde le hostigan" y donde "se dicen barbaridades" en su contra. El responsable socialista hacía así alusión a las críticas lanzadas el martes por el ex presidente del Gobierno José María Aznar, que aprovechó el congreso para arremeter directamente contra el presidente del Gobierno. Aznar se mostró "asombrado" de que José Luis Rodríguez Zapatero sea candidato a la Presidencia tras reconocer que "engañó" a los españoles sobre la negociación con ETA después del atentado de la T-4.
"Lo que ha hecho me parece absolutamente miserable", dijo Blanco ante la acusación de Aznar. Por su parte, Zapatero se limitó a lamentar "la dificultad para contenerse que tienen algunos", en referencia al ex presidente.
