El líder del PP, Mariano Rajoy, acusó ayer al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de haber actuado como "aprendiz de brujo" con el Estatuto catalán y estar ahora "escondido" al ver las "consecuencias de su frivolidad", por lo que le emplazó a "asumir responsabilidades". Además, denunció la "imagen deplorable" que está dando el PSOE, el "otro gran partido nacional", y avanzó que su formación va a convocar a "todos los españoles a un proyecto común para España" que "abrigue la fuerza de la unidad".
Rajoy hizo estas declaraciones durante la clausura del Campus FAES 2010 en la localidad madrileña de Navacerrada, en presencia de ex presidente José María Aznar, un día después de la multitudinaria manifestación que se celebró en Barcelona en protesta por la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto. Durante su intervención, el líder de la oposición destacó que hay que respetar las reglas del juego que aprobaron todos los españoles con la Constitución y añadió que el hecho de que el Tribunal haya dictado sentencia "significa" que esas reglas "se cumplen". "Es una buena noticia para un país porque un país sin reglas de juego ya es otra cosa distinta", reiteró.
La réplica por parte del PSOE llegó por parte de la secretaria de organización de los socialistas, Leire Pajín, quien criticó ayer que los populares se rasguen continuamente las vestiduras porque una comunidad se manifieste pacíficamente en defensa de su estatuto de autonomía, cuando sus cargos llaman todos los días a la rebelión de las leyes aprobadas en el Congreso de los Diputados. "No se puede ser así de incoherente e irresponsable, ni tampoco querer gobernar a España, ya que el Partido Popular critica a un pueblo que sale a la calle a defender sus derechos", apostilló la dirigente socialista, quien destacó que las comunidades autónomas gobernadas por el PP boicotean las leyes "convirtiendo a sus habitantes en ciudadanos de tercera", criticó Pajín.
