La presencia de jóvenes en el distrito constituye otro de sus grandes valores. A pesar de su reciente inauguración, el Campus de Ramón y Cajal se ha articulado ya como uno de los espacios de la comunidad universitaria con una mayor demanda por parte de los estudiantes. Sus instalaciones, así como los numerosos servicios que ofrece a los universitarios, han permitido que se llene a diario de miles de jóvenes que acuden a recibir sus clases o hacer uso de la amplia biblioteca que posee. Un hecho al que contribuye la buena conexión que tiene con otros puntos de la ciudad gracias al intercambiador de transportes de San Bernardo, al que es posible acceder a través del cercanías de Renfe, la Línea 1 del Metro, los autobuses urbanos, el carril bici y, a corto plazo, a través del Metrocentro.
En su conjunto, el Campus de Ramón y Cajal está formado por cinco edificios que acogen las facultades de Ciencias Económicas, Turismo y Finanzas, Filosofía, Psicología, Derecho, Ciencias del Trabajo y Ciencias de la Educación, un aparcamiento subterráneo de dos plantas, al servicio de toda la comunidad universitaria, y un amplio comedor que completa el aprovechamiento de sus más de 41.000 metros cuadrados de superficie. La sede de este espacio se distribuye en torno a un edificio central, cuyo uso anterior estaba vinculado con una instalación militar e industrial. En los próximos años, la Universidad de Sevilla ha proyectado finalizar su dotación con la oferta de un polideportivo, que se ubicará en la denominada Nave del Paraguas, así como con una guardería, similar a la que ya está en funcionamiento en el Parque de los Perdigones en el Campus de la Macarena, y en la que se prestará un servicio demandado por la comunidad universitaria.
Entre todos los servicios que se ofertan a los ciudadanos en el Campus de Ramón y Cajal destaca, por su superficie y dotación, la biblioteca de las facultades de Derecho y Ciencias del Trabajo. Desde su inauguración se ha convertido en un espacio clave al que acceden a diario cientos de estudiantes de ésta y otras facultades del entorno. Su amplio horario durante los meses de exámenes unido a los más de 400 puntos de lectura que oferta a sus usuarios la convierten en una de las más completas de toda las que posee la Universidad de Sevilla. Su otro gran valor reside en la existencia de una colección que alberga un fondo con más de 120.000 volúmenes de libre acceso para los estudiantes.
Pero la presencia universitaria en el Distrito Sur no sólo se limita a este campus. En el barrio de Las Letanías se ubica la Residencia Universitaria Flora Tristán, un amplio espacio inaugurado en 2004, que además de constituir un alojamiento para los jóvenes estudiantes es un proyecto social dependiente de la Universidad Pablo de Olavide. Su cercanía con estas instalaciones ha permitido desarrollar un plan de integración con sus más de 200 residentes, de los cuales 60 son becarios que colaboran con proyectos de inserción social en este barrio.
