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Raúl, a la sombra de Telmo Zarra

Raúl González es un símbolo en el Real Madrid. El '7' blanco es, con 309 goles, leyenda viva y máximo artillero de la entidad de Chamartín. Sus números en el plano ofensivo son los sextos más sobresalientes de la historia de la Liga, donde ha computado 216 dianas. El registro de Zarra, con 251, es su reto.

el 15 sep 2009 / 22:45 h.

Raúl González es un símbolo en el Real Madrid. El '7' blanco es, con 309 goles, leyenda viva y máximo artillero de la entidad de Chamartín. Sus números en el plano ofensivo son los sextos más sobresalientes de la historia de la Liga, donde ha computado 216 dianas. El registro de Zarra, con 251, es su reto.

El Molinón fue testigo mudo de uno de los hitos en la historia del Real Madrid. Raúl González, el eterno capitán, celebró en Gijón su gol número 309 con la camiseta de la entidad de Chamartín, en la que ha sido capaz de firmar 216 en Liga, la sexta cifra más brillante en los 80 años de vida del torneo doméstico. Tras haber alcanzado a Di Stéfano en la lista de máximos artilleros del club, el '7' blanco, con 31 años, espera unir a su palmarés el logro de ser el gran ariete del fútbol español.

Raúl ha sido el encargado de liderar el ataque del conjunto del Bernabéu desde su debut. De sus 309 tantos, el canterano obtuvo 216 en Liga, 64 en Champions, 18 en Copa, 7 en Supercopa de España, 1 en la Supercopa de Europa, 1 en la Intercontinental y 2 en el Mundial de clubes, un palmarés que en la Liga sólo cinco delanteros mejoran. El primer integrante de la lista de máximos realizadores fue Zarra, con 251 goles. Hugo Sánchez (234), Alfredo Di Stéfano (227), César (226) y Quini (219) completan el top 5.

Rachas. El Real Madrid se alzó en El Molinón con su octavo triunfo consecutivo en Liga, una racha que igualó o mejoró en 11 precedentes anuales. Concretamente, el bloque blanco sólo cedió el título de la regularidad en una campaña tras haber encadenado ocho o un número superior de victorias. En la 60-61, el conjunto de Chamartín consiguió sumar 15 jornadas ganando. En aquella ocasión, el once entonces adiestrado por Miguel Muñoz fue primero, con 12 puntos de ventaja sobre el Atlético de Madrid, segundo.

Repitió la estadística dos años más tarde, cuando se alzó con el título tras ganar 11 encuentros de forma consecutiva. Y con 9 jornadas sumando el máximo botín fue campeón en la 68-69, con 9 puntos de renta sobre Las Palmas, y en la 85-86, con 11 de ventaja sobre el Barça y Luis Molowny en la dirección deportiva. Con la actual espiral -8 victorias seguidas- fue primero en la 61-62, 64-65, 87-88, 88-89, 00-01 y 07-08.

Únicamente entregó el cetro en la 90-91, etapa en la que claudicó ante el Barça y con Di Stéfano en el banco. Precisamente, su eterno rival sólo fue campeón en una ocasión después de haber encadenado 10 o más triunfos -en la 2005-06 después de ganar 14 semanas seguidas-.

Ruptura. El Mallorca dinamitó una racha de 8 derrotas consecutivas a domicilio tras su victoria en Soria. Los discípulos de Gregorio Manzano habían alzado su último éxito como visitantes el 28 de septiembre, cuando ganaron en Santander al Racing (1-2).

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