Deportes

Rayo-Betis, una final entre dos iguales

Se enfrentan los dos mejores equipos de la categoría. Ambos juegan al ataque y por compartir comparten hasta el concurso de acreedores.

el 21 mar 2011 / 22:03 h.

Nacho y Trejo, en el Betis-Rayo de la primera vuelta.
La hora de la verdad ha llegado. Las diez últimas jornadas están a la vuelta de la esquina y el Betis, antes de alcanzar al tramo definitivo, se enfrentará a sus dos rivales más directos por el ascenso. La primera final será el domingo frente al Rayo Vallecano, lo que en la práctica significa un duelo entre primero y segundo. Es decir, los dos mejores de la categoría hasta ahora. El Betis acaba de volver al liderato y el Rayo acaba de abandonarlo, pero entre ambos apenas media un punto, así que la victoria devolvería la posición a los madrileños y cualquier otro resultado valdría a los verdiblancos. Se trata de un partido en la cumbre, como diría un clásico. Y es entre dos equipos bastante parecidos.

La principal seña de identidad de Betis y Rayo es su predilección por el juego ofensivo. El equipo de Pepe Mel está recuperando la senda del fútbol combinativo y vertical que tan buenos réditos le dio en la primera vuelta, pero también notó las cinco derrotas y ahora mismo no se acerca al nivelón de puntería que solía tener. Aun así, es el segundo goleador de la categoría, con 56 tantos (1,8 por partido). El Rayo no alcanza la eficiencia de su rival pero ha marcado 50 dianas (1,6 de promedio), que tampoco están mal.

La diferencia quizá estriba en la variedad de recursos que presentan unos y otros. En el Betis hay tres hombres que han tocado la barrera de los diez goles: Rubén Castro (16), Emana (11) y Jorge Molina (10). En el Rayo hay un goleador destacado, el exsevillista Armenteros, con 15 dianas, y muy lejos aparecen Aganzo (6) y Trejo, Piti y Coke (5). El lateral derecho, pretendido por el Betis en verano, es el factor sorpresa de la escuadra dirigida por José Ramón Sandoval.

Su preferencia por tener el balón y atacar también hace de Betis y Rayo dos buenos conjuntos defensivos. Cuanto más tiempo está el esférico en el campo rival, menos está cerca de sus porterías. El Betis llegó a tener en su día la meta menos batida de la categoría y en los últimos encuentros ha recobrado parte de su solidez, pero el bache también ha repercutido en esos registros y ahora es cuarto en el ranking, con 29 goles en contra (menos de uno por encuentro). El Rayo ha encajado 33, la gran mayoría (22) fuera de casa; en Vallecas sólo ha recibido 11 en 14 partidos.

El Rayo, en general, es muy potente como local. Sólo ha dejado ir 9 de los 42 puntos que se han dirimido en el Teresa Rivero (el Betis ha perdido 8 de 45 en Heliópolis) y apenas ha sufrido una derrota, el 1-3 frente al Celta. El conjunto verdiblanco, en cambio, flojea como visitante, con 22 puntos de 45 posibles, aunque en Gerona rompió al fin una racha de tres meses sin vencer fuera de Heliópolis.

LA CONCURSAL Y LAS BAJAS. Betis y Rayo tienen otras dos circunstancias en común, más bien dos problemas: la ley concursal y las bajas. Ambos clubes se encuentran en concurso de acreedores, el Betis por su pésima situación económica y una deuda de 66 millones de euros y el Rayo por la nefasta gestión de la familia Ruiz-Mateos en Nueva Rumasa, el holding al que pertenece el club. En cuanto a las bajas, también son una constante en ambos. En la avenida de La Palmera, las lesiones han sido implacables desde el principio (Arzu, Pereira, Odonkor, Momo, Miguel Lopes, Dorado, Emana...). En la avenida del Payaso Fofó, los problemas médicos han dejado un solo central apto a Sandoval, el joven Arribas, porque Salva tiene para largo y Amaya sufrió una rotura fibrilar hace un par de semanas, pero hay otra ausencia que nada tiene que ver con la enfermería y sí con el dinero: en febrero, el Rayo vendió a otro central, Borja Gómez, al Karpaty Lviv ucraniano.

  • 1