Local

'Razonablemente incómodos'

El Gobierno nunca ocultó que cerrar un modelo de financiación que guste a todas las comunidades es un sudoku difícil de encajar. En la recta final de la negociación del futuro modelo, el vicepresidente económico, Pedro Solbes, confió ayer en que las cifras que ponga sobre la mesa puedan dejar a todos "razonablemente incómodos".

el 16 sep 2009 / 00:32 h.

TAGS:

El Gobierno nunca ocultó que cerrar un modelo de financiación que guste a todas las comunidades es un sudoku difícil de encajar. En la recta final de la negociación del futuro modelo, el vicepresidente económico, Pedro Solbes, confió ayer en que las cifras que ponga sobre la mesa puedan dejar a todos "razonablemente incómodos".

La semana que viene será clave para ver hacia dónde camina la negociación del nuevo sistema de financiación. El Ejecutivo central esperará, por lealtad institucional, a que Galicia forme nuevo gobierno para convocar al Consejo de Política Fiscal y Financiera -donde se sienta con todas las comunidades- y poner ahí sus cartas sobre la mesa. El ministro de Economía aseguró ayer que su departamento tiene "una idea clara" de la cifra que ofrecerá a las autonomías. "Ahora consiste -dijo- en llegar las dos partes a unos números que, seguramente, no serán cómodos para nadie, pero suficiente para que todos nos encontremos razonablemente incómodos".

Un final feliz para todos se antoja casi imposible. Los últimos tirones de Cataluña no han sentado bien ni al Gobierno ni a otras comunidades socialistas como Andalucía o Extremadura, aunque ambas entienden que la postura negociadora es "legítima". El PSOE-A, de hecho, ha avisado que los catalanes no tendrán privilegios en la financiación y que si el Ejecutivo tiene que poner más recursos no serán sólo para ellos. De los 7.000 millones adicionales que el Ejecutivo de Zapatero pondrá para cerrar el sudoku -según la cifra que manejó en público el presidente de la Junta, Manuel Chaves- irían 1.200 a las arcas de la Generalitat el primer año, que subirían hasta 2.000 millones más en el próximo trienio. Estos son los datos que ha filtrado Cataluña, que además aseguró que ha rechazado esta oferta por considerarla insuficiente. El Gobierno andaluz también ha hecho sus cálculos. Reclama unos 1.000 millones de euros adicionales y estima que, teniendo en cuenta su población, la comunidad se quedarña con el 15% del total en el reparto de recursos.

El vicepresidente económico insistió ayer en la misma idea que sostienen los socialistas andaluces: que los números no importan tanto como los parámetros que definirán el reparto del dinero público durante los próximos años. "Lo importante son los principios y criterios; la cifra será el elemento resultante de esto", señaló Solbes.

El criterio principal que propone el Gobierno para distribuir los fondos entre las regiones es la población y el incremento que ésta ha experimentado desde el último censo, en 1999. La población será la base, pero se ponderará por bloques de edad y por políticas; por ejemplo, el número de niños en edad escolar o la asistencia sanitaria de los mayores. Andalucía, con ocho millones de habitantes, será la comunidad que más dinero reciba en términos absolutos al ser la más poblada. El jueves, en el pleno del Parlamento, Chaves garantizó que Andalucía será la que "más cobre" en el futuro sistema de financiación.

chaves, "dimisión". El PP-A cree que, después de estas declaraciones, Chaves deberá dimitir si al final Andalucía "no es la que más gana" en el nuevo modelo. Antonio Sanz, secretario general del partido, mostró su "preocupación" por la "debilidad" del PSOE-A en un "momento clave, donde está en juego tanto". Criticó que los socialistas y la Junta, en lugar de "plantar cara", sigan manteniendo una posición "fría de apoyo" al sistema de financiación "bajo un cheque en blanco" que se dio antes del inicio de la negociación, en referencia a la cuantificación de la deuda histórica en 1.204 millones. "Los andaluces estamos pagando las consecuencias de haber respaldado algo [el futuro sistema de financiación] sin conocer previamente las cifras", añadió.

El Gobierno de Zapatero -que admite que cuadrar los intereses de todas las comunidades es prácticamente una utopía, más aún en la difícil coyuntura económica actual- se encuentra además en un delicado escenario político. En el Congreso no tiene mayoría y necesita del apoyo de los nacionalistas, pero el tira y afloja de los catalanes con la financiación está tensando mucho sus relaciones. A esto se añade los recelos que ha despertado en algunas regiones la cifra de la deuda histórica.

  • 1