La asociación conservacionista WWF ha instado a un mayor control de seguridad por parte de la guardería forestal y el Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ante los casos de "furtivismo" que siguen dándose en el territorio andaluz y que, añaden los ecologistas, se cobran víctimas mortales como el ejemplar de lince ibérico localizado en el término jiennense de Vilches que presentaba diversos traumatismos, "especialmente severos en tórax y cráneo".
El responsable del Proyecto LIFE+Iberlince por WWF, Ramón Pérez de Ayala, ha indicado a Europa Press que lo sucedido es "bastante preocupante" en la medida en que "tampoco se han solucionado casos parecidos en el entorno de Guarrizas", apuntando específicamente a la "falta de iniciativa" de la Benemérita en este entorno, a pesar de que "en la zona de Doñana se toman muy en serio estos temas".
"Es muy importante cortar estos problemas de raíz: como no hay vigilancia, se crean sumideros difíciles de controlar", ha lamentado Pérez de Ayala, que ha explicado que la problemática se agrava en la temporada de cría, pues los cachorros "pueden estar desapareciendo sin que los controlemos por mucha vigilancia que haya en el proyecto LIFE".
Según WWF, siguen existiendo casos de furtivismo, aunque su importancia puede verse eclipsada por el "dramático" aumento de muertes por atropello --en 2014 ya han fallecido tres linces por esta causa, hallados en el pasado mes de enero en la N-420, en la zona de Azuel (Córdoba); en la línea ferroviaria Linares-Alcázar de San Juan, en pleno corazón de Guarrizas (Jaén), y en la carretera A-483, en el término municipal de Almonte (Huelva)--. No obstante, son "más difíciles de detectar porque requieren muchísimo trabajo".
Además, agrega Pérez de Ayala, el hecho es "preocupante" al reflejar una "inquietante" actitud de una parte de la población local. Ante ello, la solución es extremar el control, "para que la gente sea consciente de que al mínimo descuido se les va a pillar".
