La refinería Balboa, que promueve el proyecto del oleoducto que cruzaría la provincia de Huelva de norte a sur, ha defendido el citado proyecto y ha asegurado que, aunque la refinería esté ubicada en Extremadura, "sí beneficiará" a la provincia onubense porque "un porcentaje importante de los trabajadores procederán de Huelva", indicando además que la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), emitida por el Ministerio de Medio Ambiente el pasado mes de julio, aunque finalmente fue desfavorable, "deja claro en todo momento, que el oleoducto, en todo su recorrido, no afecta a Doñana".
Según han informado a Europa Press desde la empresa, la refinería tiene un compromiso con la Junta de Andalucía para crear un Centro de Formación en el norte de la provincia onubense para los futuros trabajadores de esta refinería, unos 3.000 entre directos e indirectos, de los que "un porcentaje importante procederán de Huelva", han insistido.
Del mismo modo, aseguran que durante los tres años que dure la construcción de la planta "se generará un promedio de 3.500 puestos de trabajo" y se contratarán a numerosas empresas auxiliares, teniendo "muy en cuenta", como así lo sabe el Gobierno andaluz, las que procedan de Huelva, por cercanía geográfica y por la experiencia que tienen en el sector del refino.
Refinería Balboa también contribuirá, de manera "decisiva", a la reactivación del empleo y de la economía del puerto de Huelva, tal y como lo ha hecho la ampliación de la refinería de Cepsa, y han añadido que el proyecto invertirá más de 180 millones de euros en las instalaciones de descarga de crudo y en las de despacho de productos para la exportación, así como en el parque de almacenamiento del puerto.
Los estudios y simulaciones realizados por refinería Balboa y que aparecen en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) demuestran que, "bajo ninguna circunstancia, tanto durante la construcción como durante la operación, el oleoducto afectaría a Doñana". Prueba de la seguridad de este tipo de infraestructuras es que existe un oleoducto, en operación desde hace más de 20 años, que parte de la refinería de Cepsa en Huelva y que atraviesa toda la provincia en dirección a Sevilla con un trazado muy cercano a Doñana y "nunca ha registrado ningún incidente que haya ocasionado derrames de hidrocarburos", señalan.
Refinería Balboa, según insisten, tampoco supondrá "un riesgo añadido" para la costa de Huelva "como lo demuestran" los estudios realizados por el promotor del proyecto y avalados por el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex) y por el Instituto Geológico y Minero de España (IGME).
Los resultados de estos estudios coinciden con los datos históricos que, desde la década de los años 70, se registran en el puerto de Huelva donde "no consta ninguna colisión, ni percance de importancia, ni incidente significativo en la navegación de buques petroleros en el Puerto que haya supuesto algún problema ambiental".
El Cedex determina que la probabilidad de que se produzca un vertido de importancia en la monoboya es de "uno cada 200 años y de uno cada 500 años" en la tubería submarina. Asimismo las probabilidades de que choquen dos buques, siendo al menos uno de ellos un petrolero, están en el orden de "uno cada 3.000 años".
Desde la empresa han manifestado que éstas son las probabilidades que existen hoy en día en el puerto onubense donde ya opera una refinería de petróleo y otras empresas dedicadas a la comercialización de productos petrolíferos y "no variará, de manera significativa, con la puesta en marcha de Refinería Balboa", añaden.
EL MINISTERIO, LA ULTIMA PALABRA
Refinería Balboa espera que, el Ministerio de Industria que tiene ahora la última palabra, como órgano sustantivo, autorice la planta de refino por su viabilidad técnica y medioambiental después de emitir el pasado mes de julio una declaración desfavorable al respecto, indicando además que por la creación de empleo y de riqueza que supondrá para toda su zona de influencia, "las decisiones políticas se pueden cambiar".
Todo ello a raíz de las declaraciones que realizó el fiscal de Medio Ambiente de Huelva, Alfredo Flores, en una entrevista a Europa Press, en la que aseguró que este proyecto "no le aporta nada" a la provincia onubense y supone "un peligro tremendo".
Al respecto, desde la refinería consideran que en la situación económica actual y con los últimos datos de desempleo, considerar que un proyecto que va a invertir más de 300 millones de euros en la provincia de Huelva y de Sevilla y que contratará a más de un millar de desempleados en estas dos provincias, va a tener nulos beneficios económicos "es faltar a la verdad y de ser bastante irresponsable", a lo que añaden que "despreciar estos datos en estos momentos resulta imprudente".
Por su parte el fiscal remarcó que el peligro "no lo entraña tanto el oleoducto, que también, sino más bien el tránsito de barcos petroleros" que se dirigirían hacia el puerto de Huelva, con "el peligro de fuga o de accidente que eso conlleva". En este sentido, hizo hincapié en que "económicamente a Huelva no le aporta nada", a lo que añadió que medioambientalmente "tampoco beneficia a la provincia".
