El palio de San Esteban continúa renovando sus bordados. El taller de José Antonio Grande de León entregará mañana la bambalina delantera del palio de la Virgen de los Desamparados, una vez terminados los trabajos de restauración y pasado a nueva malla de oro de esta obra.
La pieza, según comenta el bordador, se encontraba en mal estado de conservación y "mostraba un oscurecimiento generalizado debido al paso del tiempo". Especialmente estropeadas se encontraban las cogidas a la crestería de madera, "mediante tachuelas y puntillas oxidadas que atravesaban los bordados y hacían peligrar la estabilidad de la obra", apunta Grande de León.
Durante el proceso de restauración, se ha procedido a la sustitución de los bordados interiores de la bambalina, "de mucha menos calidad que los exteriores, debido a la difícil situación económica que atravesaba la hermandad cuando los realizó". Del interior, por tanto, sólo se han salvado y aprovechado los bordados que ha merecido la pena restaurar, ya que una gran parte de las piezas eran de recortes.
A petición de la hermandad se ha realizado un fleco de madroñera un poco más largo que el antiguo, para que la bambalina gane unos centímetros. "La corporación siempre las ha considerado muy cortas", explica el artista. De esta forma, las bambalinas han ganado entre 5 y 7 centímetros de largo tras esta intervención.
La bambalina será entregada a la hermandad esta semana, por lo que la Virgen de los Desamparados podrá lucirla en su paso ya restaurada el próximo Martes Santo.
Grande de León ya acometió el año pasado la restauración de los bordados del techo de palio de la dolorosa de San Esteban, recolocando la gloria original del paso.
La cofradía de la Puerta de Carmona tiene intención de continuar en años venideros la restauración de las restantes caídas del palio, completando así la renovación de los bordados del paso emprendida el año pasado.
