Felipe Reyes, pívot de la selección española, presenció ayer el entrenamiento de sus compañeros de equipo, después de que acabara de llegar de Madrid tras pasar consulta con su "médico de confianza" para tratarse un problema en el cuello, porque, dijo, no conoce "los hospitales turcos".
"Estoy bien y más después de haber descansado ayer en casa. Vuelvo con las pilas cargadas. El cuello está muy bien y no tengo nada grave, simplemente una sobrecarga por los partidos jugados. No hay ni hernia, ni problemas en los discos intervertebrales. Me han puesto un tratamiento y espero estar al cien por cien el miércoles para ayudar al equipo", explicó el pívot cordobés.
En apenas veinticuatro horas, el jugador fue y vino a Madrid en un viaje relámpago, algo que ha sonado un poco raro."Merecía la pena porque he ido a mi médico de confianza. No conozco los hospitales turcos y la última vez que me pasó algo parecido me fue muy bien el tratamiento. Cuando me pasan estas cosas puedo estar una semana o semana y media fuera de combate", indicó Reyes.
La seguridad de que podrá estar en el partido de cuartos de final de mañana contra Serbia se empezará a conocer hoy mismo a lo largo del entrenamiento."Probaré en el entrenamiento y si no pasa nada estaré con mis compañeros. La mejoría de ayer a hoy ha sido grande y se creo que con el tratamiento irá a mejor".
"Me ha infiltrado. Han sido un par de pinchazos. Una cosa sencilla pero que prefería que hiciera el médico de mi confianza", concluyó Felipe Reyes. Otro que se ha recuperado a tiempo para el partido de mañana es Marc Gasol que el domingo sufrió una amigdalitis aguda, aunque, tras recibir el tratamiento habitual para este tipo de afecciones, su participación en el partido no corre peligro.
Por su parte, Juan Carlos Navarro, capitán de la selección española de baloncesto, declaró, al término del entrenamiento que ayer efectuó el equipo en el pabellón Abdi Ipekçi, que "la victoria ante Grecia" les ha dado "fuerzas"."Después de ganar a Grecia y pasar a cuartos de final hemos crecido en confianza. Contra Serbia, volveremos a tener un partido difícil porque es un equipo formado por jugadores de gran calidad, con 'treses' (aleros) muy altos. Será complicado, pero la victoria nos ha dado fuerzas", dijo la 'bomba' Navarro.
Las pequeñas lesiones están ahora rompiendo un poco el ritmo de entrenamientos.
"Marc, después de pasar mala noche por una amigdalitis, ha preferido venir a entrenar. Está mejor. Felipe ya ha regresado de Madrid y parece que la cosa no es grave y yo tengo más confianza en la espalda y las molestias van remitiendo", explicó el capitán.
