Río derrotó en la ronda final a la capital de España por un amplio margen, 66-32, que habla del deseo del COI de abrir el mapa de los Juegos a zonas aún inexploradas. Después del resultado de ayer, África es el único territorio ajeno a los Juegos.
La candidatura brasileña fue defendida con pasión, cercanía y empeño por el presidente del país, Luis Inàcio Lula da Silva, que intervino ante la asamblea olímpica reunida en Copenhague para solicitar unos Juegos que, dijo, se merecía la juventud de Sudamérica. Lula afirmó que había llegado "la hora" de Río, la única entre las diez principales economías del mundo que nunca ha tenido unos Juegos.
"Nuestra candidatura no es sólo nuestra, también de toda América del Sur, de 400 millones de personas, entre ellos 180 millones de jóvenes", señaló Lula, quien habló de la necesidad de corregir el "desequilibro" geográfico en la concesión de los Juegos.
Ocho horas después, cuando ya se sabía ganador, Lula lloró de felicidad ante centenares de periodistas de todo el mundo. "Brasil ha ganado definitivamente su ciudadanía internacional, ya no somos más ciudadanos de segunda clase", afirmó.
Madrid se quedó a las puertas de los Juegos por segunda vez consecutiva. Más cerca incluso que hace cuatro años, cuando terminó por detrás de Londres y París. La presencia del rey Juan Carlos y del presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, acompañando al equipo del alcalde Alberto Ruiz-Gallardón, no bastó para otorgar los Juegos a Madrid en el momento decisivo. Tampoco pudo inclinar la balanza a favor de Madrid el emotivo llamamiento del presidente honorario del COI, Juan Antonio Samaranch, que pidió a sus colegas olímpicos que "en el final" de sus días tomen en consideración premiar a su país "con el honor de organizar los Juegos Olímpicos en Madrid". Madrid exhibió ante el COI sus instalaciones ya terminadas, la gloria de sus deportistas y el apoyo de sus políticos, pero se cumplió el principio de alternancia continental que impide que dos ediciones consecutivas de los Juegos se disputen en el mismo continente. Londres hará los de 2012.
Chicago fue la primera en caer eliminada, con sólo 18 votos. El viaje relámpago del presidente Barack Obama, que llegó a Copenhague minutos antes de intervenir ante el COI, no surtió el efecto deseado. Obama habló de forma convincente, pero la presentación de Chicago se centró en la vertiente emocional del proyecto, olvidando casi por completo los aspectos técnicos.
Tokio fue la siguiente en caer. Con su primera candidatura desde 1964 y el apoyo también en persona del primer ministro, Yukio Hatoyama, centró la presentación en su solidez financiera y en su apuesta ecologista. No le sirvió.
digiriendo la derrota. Si todos los que se acercaron a consolar a Madrid la hubieran votado, habría ganado con holgura. "Estaba con vosotros", dijo el filipino Francisco Elizalde al alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón. "Yo estaba en esta misma situación hace cuatro años", dijo el francés Guy Drut.
"Todos los votos de Chicago han ido a Río", constataba el alcalde. "Esa ha sido la clave".
Mientras, la delegación brasileña empezaba a desplegar banderas de su país y a entonar Cidade Maravilhosa: "Cidade Maravilhosa, cheia de cantos mil. Cidade Maravilhosa, coração do meu Brasil"...
La rotación continental, pese a ser una ley no escrita en el olimpismo, la pujanza de la economía brasileña y el prestigio del presidente Lula da Silva fueron determinantes para la elección de Río de Janeiro. Las condiciones geopolíticas y económicas son las que pueden explicar la victoria de la ciudad finalista con la menor calificación en el examen técnico realizado por el Comité Olímpico Internacional. Río de Janeiro, que ni siquiera había sido finalista en la disputa por los Juegos de 2008 y 2012, tuvo en el examen técnico una nota de 6,4, una calificación bastante modesta frente a las de Chicago (7), Madrid (8,1) y Tokio (8,3).
Esa desventaja fue la que llevó al Comité Olímpico Brasileño (COB) a enfatizar en los asuntos no técnicos en su campaña para defender la candidatura carioca. Lula, en todos sus pronunciamientos, alegó que había llegado la hora de Suramérica y del COI de corregir ese "desequilibrio" geográfico en la concesión de los Juegos. Esgrimió que "Brasil forma parte de los diez países más ricos del mundo (en PIB) y es el único que no realizó unos Juegos" e insistió en airear las estadísticas que indican que Brasil será uno de los pocos países que terminará este año con crecimiento económico, un país donde 30 millones de personas han salido de la pobreza en los últimos años.El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, felicitó a Río de Janeiro por su victoria sobre la capital española en la final para conseguir los Juegos Olímpicos de 2016 y aseguró que "Madrid debe perseguir todos los objetivos que puedan hacer de ella una ciudad mejor". En una conferencia de prensa cargada de emotividad, interrumpida por las ovaciones y llena de agradecimientos por los apoyos recibidos y el trabajo de la candidatura, el alcalde aseguró con la voz quebrada que "Madrid ha hecho lo que tenía que hacer, porque no podía ni debía dejar de recorrer el camino después del primer esfuerzo de Singapur".
"No nos vamos a hundir en la tristeza que todos tenemos. Después de no ganar en la elección de 2012 dije que no era un fracaso, el fracaso es rendirse", añadió con la voz quebrada.
"No podemos dejar que el resultado nos rompa nuestros sueños e ilusiones. Madrid es mucho más que ese maravilloso sueño que se nos ha escapado. No lo hemos conseguido pero hemos dado una formidable lección a España y al mundo, de humildad, trabajo serio, profesionalidad e ilusión y no podemos dejar que el resultado nos rompa nuestros sueños", reiteró el regidor.
Gallardón agregó que hay que celebrar que "por primera vez en la historia Sudamérica pueda albergar unos Juegos" y señaló que "el COI ha entendido en una final que la opción de Río era preferible". "Respetamos deportivamente ese resultado y agradecemos al COI que nos haya dado la oportunidad de mostrar la fabulosa realidad de Madrid, pero Madrid es mucho más que ese maravilloso sueño que se nos ha escapado", dijo.
El alcalde destacó que "la candidatura ha tenido el mejor equipo que se ha montado en muchísimo tiempo para poder alcanzar un objetivo" y que "no hacerlo no significa que hayamos fallado", concluyó.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, reconoció que la no designación de la capital como sede de los Juegos de 2016 "es un gran decepción", aunque empezó a pensar en el futuro. "Para mí es una gran decepción, como para todos los madrileños y españoles. Hemos llegado a la final y Madrid va a acabar organizando unos Juegos, veremos cuándo", sentenció.
El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirin, expresó su más firme apoyo a la candidatura de Madrid para que continúe con "este hermoso sueño olímpico, que ha tenido al alcance de la mano, superando a grandes ciudades del prestigio mundial de Chicago y Tokio". Monteseirín aboga por que Madrid "con su alcalde al frente, presente nuevamente en 2020 un proyecto cargado de buen trabajo y con reconocidos éxitos del deporte español y sus deportistas olímpicos". "Sevilla, como toda Andalucía, seguro irá de la mano con Madrid", añadió.
También el príncipe Alberto de Mónaco mostró su apoyo a Madrid y animó a la capital de España a volver a presentar su candidatura para 2020: "Creo que sería una buena oportunidad. Madrid debería intentarlo otra vez, sería su ocasión".