El abogado del ex asesor urbanístico del Ayuntamiento de Marbella (Málaga), Juan Antonio Roca, reclamó ayer que sea declarado improcedente su despido por parte del Consistorio, mientras que éste asegura que no existió una relación laboral con el considerado cerebro de la trama del caso Malaya.
Durante el juicio laboral sobre la demanda de despido presentada por Roca y que quedó ayer visto para sentencia, el abogado del Ayuntamiento, Santiago Jiménez, subrayó que entre Roca y el Consistorio no hay "una relación laboral", sino que el ex asesor utilizó a las empresas municipales "a propia conveniencia y en connivencia con otras personas" como los ex alcaldes Jesús Gil, Julián Muñoz o Marisol Yagüe.
Sin embargo, se trata de un "contrato de trabajo simulado, no real, porque no hay relación laboral, ni Roca ha ido a la oficina, sino que daba las instrucciones y fijaba su propio horario". Asimismo apuntó la existencia de una sentencia firme contra Roca que le condena a nueve meses de prisión, por lo que se podría resolver el contrato, añadiendo que si hubiera relación laboral el despido sería procedente por falta injustificada al trabajo.
