La bailaora Rocío Molina estrena hoy, a partir de las 21.00 horas en el Teatro Lope de Vega de Sevilla, su nuevo espectáculo, titulado Vinática, en el que ahonda en la deformación de la técnica adquirida durante muchos años para tomar más conciencia de su propio lenguaje.
Esta nueva puesta en escena de la bailaora malagueña lleva detrás una "profunda" investigación en torno a la deconstrucción del cuerpo y su armonía y se caracteriza por una dramaturgia "espectacular" a cargo de Roberto Fratini, así como por la combinación de palos tan flamencos como cantiñas, zambras, seguiriyas y bulerías y livianas con música clásica como Chopin, explicó ayer su autora.
Asimismo, en esta ocasión, Molina se rodea de un grupo de jóvenes punteros del mundo flamenco que la acompañan en la búsqueda de las esencias de esta nueva creación, Eduardo Trassierra a la guitarra; José Ángel Carmona Manzano, Carmona, al cante y la mandola; y el bailaor José Manuel Ramos, El Oruco, a las palmas y el compás.
A sus 26 años, Rocío Molina , que baila desde los tres, ha actuado en los escenarios más importantes del mundo y ha sido galardonada en numerosas ocasiones. El genio de la danza Mikhail Baryshnikov, tras presenciar una actuación de la bailaora en Nueva York, le rindió homenaje arrodillándose ante ella en reconocimiento a su arte.
Es Premio Nacional de Danza 2010 en la modalidad de Interpretación, distinción otorgada por el Inaem del Ministerio de Cultura por "su aportación a la renovación del arte flamenco y su versatilidad y fuerza como intérprete capaz de manejar con libertad y valentía los más diversos registros".
Recientemente recibió en su tierra natal el Escudo de Oro de Vélez-Málaga (2011) y la Medalla de Oro de la Diputación Provincial de Málaga (2011). Además, entre otros reconocimiento, es Premio de la Crítica Flamenco Hoy 2007 y 2008 a la Mejor Bailaora, así como Premio Giraldillo de la XV Bienal de Flamenco de Sevilla 2008 a la Mejor Coreografía, por Oro Viejo.