La batalla por lograr la candidatura socialista a la Comunidad de Madrid se encuentra en plena ebullición. Ayer echó más leña al fuego el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, al hacer públicas sus preferencias para las primarias del 3 de octubre en una entrevista en la Cadena SER.
"El principal activo de Tomás Gómez -secretario general del Partido Socialista en Madrid- es haber dicho no a [José Luis Rodríguez] Zapatero -secretario general del PSOE y presidente del Gobierno-, (...) pero si gana las primarias eso se convertirá en una rémora para él y para el partido", advirtió.
En la entrevista, recogida por Efe, Rubalcaba también comentó que si él hubiese sido Gómez y le hubiese llamado el secretario general del partido habría dado "un paso atrás", habría reconocido que la titular de Sanidad, Trinidad Jiménez, es mejor candidata y seguiría como secretario porque la "vida política da para mucho". Así, el ministro aseguró que el mayor activo de Gómez sea que fue el hombre que dijo no a Zapatero y precisó que se trata de un "activo relativo" ya que "si un día gana las primarias es un pasivo, una rémora para él y para el partido".
Sobre este asunto, Rubalcaba dijo que la gestión del partido ha sido perfecta, "se ha dialogado sin voluntad de marginar a nadie poniendo sobre la mesa los datos que se tenían e intentando hacer lo mejor para el partido". En este punto reconoció que tanta Zapatero como el vicesecretario del PSOE y ministro de Fomento, José Blanco, y el vicepresidente Manuel Chaves hablaron con Gómez sobre la idoneidad de su candidatura. Aunque no era necesario por su evidencia tras estas declaraciones, Rubalcaba mostró su preferencia por la candidatura de Trinidad Jiménez porque "está en un momento óptimo de su carrera política" y es una persona dialogante, "lo que en Madrid viene muy bien".
La propia Trinidad Jiménez agradeció ayer las "expresiones de apoyo" que le brindan sus compañeros de partido, pero rehusó comentar las declaraciones del ministro del Interior.