Tras regresar de Croacia y obligado, calendario manda, a centrarse enseguida en la competición doméstica, el plantel verdiblanco retomó en la tarde del viernes las sesiones de entrenamiento con vistas al duelo del domingo ante el Getafe en el Coliseum Alfonso Pérez (19.00). Una sesión vespertina que trajo malas y buenas noticias. En el lado negativo, la ausencia de Salva Sevilla en el entrenamiento en la Ciudad Deportiva Luis del Sol. El centrocampista de Berja no se presentó debido a una fuerte contusión en el costado izquierdo que sufrió en uno de los lances del partido del jueves ante el Rijeka.
Aunque no parece que el asunto revista excesiva gravedad, lo cierto es que el mediapunta es seria duda para el partido del domingo en la localidad madrileña por mor de ese golpe. El plantel bético realizará mañana una última sesión de trabajo, que será a puerta cerrada, y posteriormente el técnico Pepe Mel dará la lista de convocados para ese encuentro. La evolución del almeriense durante la noche, y si puede entrenar, será lo que determine si forma parte o no de la expedición verdiblanca.
La noticia grata de la jornada, aunque haya que tomársela con todas las reservas del mundo, la protagonizó Rubén Castro. Y es que el goleador canario volvió a ejercitarse con el grupo con aparente normalidad. El delantero intervino en la sesión completa, incluso hizo un rondo con sus compañeros, pero en principio no cabe esperar que el entrenador madrileño le incluya entre los que viajen hasta Getafe.
El resto de jugadores, a excepción del canterano Eder Vilarchao, se ha entrenado con total normalidad. Los titulares en Croacia se retiraron de la sesión antes de la conclusión, mientras que los demás completaron un trabajo en el que el balón fue el protagonista, con una serie de entradas por ambas bandas y ejercicios de posesión del esférico.
