Rufino González y José Miguel López Catalán, tras el trasvase accionarial.
Rufino González, uno de los principales accionistas a título individual del Betis, ha vendido este mediodía su paquete accionarial al empresario sevillano José Miguel López Catalán, miembro de la comisión ejecutiva de la Fundación Heliópolis. La compraventa se ha cerrado en una notaría de Sevilla.
Rufino González, que fue consejero durante toda la etapa de Manuel Ruiz de Lopera, poseía un paquete de 4.100 acciones (un 3,5% del total) desde junio de 1992, cuando el Betis se transformó en Sociedad Anónima Deportiva.
Desde hace semanas se venía especulando con la posibilidad de que Rufino González vendiera su paquete accionarial al abogado y también ex consejero Manuel Castaño, que ya posee cerca de 5.000 acciones del club, casi un 5% del total, y con el que había mantenido conversaciones en tal sentido. Rufino, no obstante, también tenía otras ofertas por su paquete accionarial y llevaba semanas negociando con López Catalán.
José Miguel López Catalán paga por las acciones casi el doble de su valor nominal, pues las adquiere a 110 euros cuando en 1992 costaron 60. El desembolso total es de unos 450.000 euros.
Al hacerse con este paquete, los miembros de la Fundación Heliópolis, de la que salió el expresidente Miguel Guillén, controlan cerca del 7% del accionariado del club y pasan a convertirse en su principal accionista, después de que hace meses un grupo de más de 30 miembros compraran el paquete del ex vicepresidente Miguel Espina (que poseía el 1,6%), las de la Peña Bética José Ramón Esnaola y otras a proveedores a los que Lopera pagó con acciones del club en 1992.
