El concejal responsable de esta materia, Francisco Serrano, explicó que, en la mañana del pasado jueves, se derrumbó "el techo que cubre parte de la zona afectada, resultando dañados 25 nichos, aunque ya el día anterior los operarios que trabajan en el cementerio se percataron de la aparición de unas grietas en esa pared". A ello hubo que sumar, posteriormente, el destrozo de otros 10, debido a nuevos desprendimientos, de los que han quedado especialmente dañados "las filas superiores, que han caído sobre las inferiores" en un efecto dominó provocado por "el material constructivo, de mala calidad, ya que prácticamente es tierra compacta".
Trabajos. El suceso se ha registrado en el patio de San Francisco, junto a la tapia que cierra el camposanto, siendo ésta la zona más antigua del cementerio. Desde que se registró el derrumbe, "los operarios están trabajando intensamente para afianzar los nichos contiguos y evitar nuevos desprendimientos, algo muy complicado precisamente por el material del que están hechos", explicó Serrano. El temporal de lluvia de los últimos meses, junto al calor que ya empieza a notarse en la ciudad, unido a la mala calidad de las construcciones, parecen haber sido las causas que ha provocado este accidente.
El edil señaló que, desde el suceso, "se está intentando localizar a los familiares afectados para proceder a la identificación, exhumación y traslado de los restos hasta los nuevos nichos que han sido construidos recientemente, aunque en algunos casos, por su antigüedad, no existen datos para poder contactar con las personas allegadas".
Lo sucedido estos días es "un grave problema que nos hemos encontrado y que puede seguir aumentando por lo que, cuando esté construido el nuevo cementerio, procederemos a clausurar la zona afectada para trasladar todos los nichos a los nuevos terrenos". Hoy está prevista una reunión para "establecer prioridades de actuación".