La Hermandad de la Macarena ha recibido el ofrecimiento de la parroquia de San Gil para acoger el paso de misterio del Señor de la Sentencia durante el tiempo que duren las obras de ampliación del museo macareno que, de cumplirse los planes de la cofradía, podrían arrancar a final de julio.
Hospitalidad entre vecinos. La parroquia de San Gil, anexa a la Basílica de la Esperanza Macarena, abre un hueco entre sus muros para albergar al paso del Señor de la Sentencia en su anunciado destierro por obras.
El propio párroco de San Gil, Antonio Borrego, aclaró a este periódico que se trata de un ofrecimiento "sin condiciones", ya que será en todo momento la junta de gobierno de la cofradía de la Madrugada la que decida la ubicación definitiva del paso dentro del templo, así como si permanecerá o no expuesto al público.
"La presencia del paso -explicó el párroco- no va a suponer una carga de ningún tipo, puesto que el templo es lo suficientemente amplio como para desarrollar los cultos habituales, incluso de las otras hermandades radicadas en la parroquia", explicó.
Ya en 1991, con ocasión de las obras de remozamiento de la Basílica llevadas a cabo con vistas a su participación como sede del pabellón de Sevilla durante la Expo 92, los titulares de la cofradía, así como el paso de misterio, se trasladaron a la vecina parroquia de San Gil.
El paso de la Esperanza Macarena será trasladado durante las obras al Apeadero del Ayuntamiento, donde permanecerá en exposición pública, mientras que el de la Virgen del Rosario, según explicó el hermano mayor de la cofradía, Juan Ruiz Cárdenas, es muy posible que permanezca en las dependencias de la Basílica.
Juan Ruiz Cárdenas, hermano mayor de la Macarena, explicó ayer a este periódico que aún no hay una fecha decidida para el traslado del paso de la Macarena al Salón del Apeadero, donde también se expondrán los tres mantos de salida de la dolorosa y algunas insignias. En la actualidad, la hermandad se encuentra "ultimando" el proyecto de obra civil de ampliación del museo macareno.
El arquitecto responsable del proyecto, Aurelio Gómez de Terrero Guardiola, señaló que se están introduciendo ligeras modificaciones sobre el proyecto original con el fin de dar mayor amplitud a las salas de exposición y hacerlas más diáfanas para favorecer la circulación de las visitas. Concluido el proyecto de obra civil, será el momento de pedir ofertas a las empresas. La intención de la hermandad es poder iniciar las obras a finales del mes de julio.