Con una misa de acción de gracias, presidida por el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, la parroquia de San Roque reabrirá oficialmente este domingo sus puertas tras diez meses de obras que han permitido garantizar la integridad del edificio y en las que la Archidiócesis de Sevilla ha invertido una cantidad aproximada de 350.000 euros.
Fue el pasado 11 de diciembre cuando el Arzobispado de Sevilla decretaba el cierre al culto temporal de la iglesia ante los graves daños que presentaba la estructura portante de la bóveda y de la cubierta del templo, en un «estado límite de agotamiento» que ponía en riesgo la estabilidad del edificio.
Aunque el templo presentaba en general un buen aspecto exterior, tras una primera inspección a la cámara de la estructura portante se comprobó que el cordón inferior de todas las cerchas metálicas que soportaban la cubierta estaba roto en algunos de sus dos extremos, lo que obligó a realizar una primera intervención de urgencia, entre los meses de enero y marzo, para estabilizar las cubiertas y bóvedas de la iglesia y evitar el riesgo de desplome. La actuación principal consistió en el atirantado de los muros para evitar el desplome de los mismos y, como consecuencia, el colapso de las bóvedas y la cubierta.
Junto a ello, el proyecto de rehabilitación, dirigido por el arquitecto Antonio Campos Alcaide y desarrollado por la empresa constructora Sanor Restaura, ha permitido recuperar la geometría en los faldones de teja e impermeabilizar las cubiertas. Además, para facilitar el posterior mantenimiento de esta estructura se han mejorado los accesos a la cámara y el paso por ella gracias a la instalación de una pasarela metálica de inspección. Se han aprovechado las obras en el interior del templo para realizar una preinstalación de climatización.
