El expresidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) Santiago Herrero se ha desvinculado hoy de los problemas en la gestión de las VPO de Sevilla Este, promovidas por la Fundación para el Desarrollo del Sur de Europa, vinculada a la entidad empresarial. Herrero ha responsabilizado a Rafael Álvarez Colunga, su antecesor en el cargo y presidente de la fundación hasta su muerte. Además, ha dicho que desconocía los impagos a los subcontratistas y el retraso de las obras.
Según han explicado fuentes del caso, en su declaración como imputado ante el Juzgado de Instrucción número 3 ha señalado que la gestión de la promoción Isbylia la llevaba "personalmente" Álvarez Colunga y posteriormente sus sucesores como presidentes de la fundación Juan Salas Tornero y Antonio Carrillo, ambos imputados como Herrero por un delito continuado de estafa. De hecho, ha dicho que desconocía que no se estaba pagando a los subcontratistas, de lo que ha tenido conocimiento a raíz de la denuncia interpuesta por estos.
Asimismo, ha explicado que tampoco conocía la falta de liquidez de la fundación porque no asistía a las reuniones de la misma como patrono, desvinculándose de toda la gestión de las obras y de las subvenciones que se solicitaron a la Junta. Por último, ha indicado que Álvarez Colunga dejó las obras al 75% y que antes de la entrada de la Sareb, el conocido como banco malo, se quedaron al 98%. Fue entonces cuando los trabajos se pararon por la paralización de los créditos.
Las obras de esta promoción están sin concluir y los subcontratistas no han cobrado por su trabajo, ni las 584 familias que entregaron diferentes cantidades a cuenta han podido recuperar ni su dinero ni los pisos.
