El presidente francés, Nicolas Sarkozy, respondió a la llamada de su homólogo colombiana, Álvaro Uribe, y asumió la mediación en la liberación de los secuestrados por las FARC. Sarkozy pidió por televisión la libertad de los rehenes al jefe de la guerrilla, Manuel Marulanda. La respuesta fue rápida: Uribe está poniendo trabas al proceso negociador.
"Tengo un sueño: ver a Ingrid entre los suyos en Navidad", dijo Sarkozy en un mensaje solemne emitido por la televisión francesa y colombiana, que marcó una nueva etapa en la participación del jefe del Estado galo en el contencioso. El primer mensaje se vio corroborado por un segundo, difundido por Radio Francia Internacional, destinado al resto de rehenes, a los que prometió que no les olvidará.
Sarkozy se colocó así al frente de una nueva iniciativa, después de que el 21 de noviembre finalizará la mediación del presidente venezolano, Hugo Chávez. Alarmado por el estado de Betancourt en las imágenes de la semana pasada y la tristeza de la carta que envió a su madre, el presidente galo apeló a la compasión del jefe guerrillero y se ofreció para buscar soluciones al conflicto del país.
Sarkozy se dirigió a Marulanda al que advirtió de la situación de Betancourt, "una mujer al borde de la muerte" que debe ser liberada "para que no pese sobre su conciencia el riesgo que supondría su desaparición".
Un segundo mensaje de Sarkozy cargado de esperanza fue llevado por las ondas a América del Sur para llegar al resto de rehenes, a los que las FARC dejan escuchar la radio. "Francia no os olvidará nunca y busca nuevos medios para liberaos y devolveos a vuestros allegados" afirmó.
Sarkozy no sólo media ya con palabras, sino también con gestos. El dirigente galo pidió por carta a su homólogo argentino, Néstor Kirchner, la colaboración de su gobierno en la liberación. La petición fue antes de que deje la presidencia, que asumirá su esposa, Cristina Fernández.
La implicación de Sarkozy cuenta con los parabienes de la familia de la candidata presidencial colombiana, secuestrada en 2002. Lorenzo Delloye, hijo menor de Betancourt, agradeció el paso de Sarkozy, "el primer jefe de Estado que se dirige directamente a Marulanda". "Comparto su sueño" añadió.
Respuesta. Las FARC también agradecieron el gesto, pero a su vez acusaron al presidente colombiano, Álvaro Uribe, de ser "la traba" para intercambiar rehenes por guerrilleros presos e insistieron en la retirada de tropas de una zona del país. "La intención del Gobierno galo es loable y sana" dijo la guerrilla, que reiteró que "se necesita un espacio adecuado". Por eso llamaron a desmilitarizar 45 días las localidades de Florida y Pradera, al suroeste del país. En este punto, Uribe dijo que "respeta el emplazamiento" para liberar a los secuestrados, pero reiteró que no retirará las tropas del territorio.
