La Guardia Civil finalizó ayer las labores de rastreo en el punto de Carmona donde el pasado sábado se desplomó una ladera sepultando varios vehículos, y concluyó que no hay víctimas. Los agentes contabilizaron en total ocho vehículos bajo el lodo, como consecuencia del desprendimiento ocurrido a raíz de las fuertes lluvias.
Los coches se encontraban aparcados muy cerca del hotel Alcázar de la Reina.
Pertenecían a un grupo de personas que habían acudido a una boda en Carmona y que los habían aparcado en este lugar, concretamente en un terreno destinado a tal fin y situado en la calle Juan de Ortega. En ese punto fueron recogidos por un autobús que los llevó hasta el lugar de la celebración. El suceso tuvo lugar alrededor de las 14.30 horas y desde ese momento se efectuaron hasta tres inspecciones para confirmar que no había víctimas.
