La SE-35 sigue tomando forma. La Gerencia de Urbanismo adjudicó el miércoles los proyectos de redacción de dos tramos de 5 kilómetros que unirán la A-IV y la ronda supernorte y ésta con la propia SE-35. Las obras deben comenzar en 2009 y tiene un plazo de ejecución de 22 meses.
Con un año de retraso, el Ayuntamiento dio ayer un nuevo paso para la construcción de la nueva ronda SE-35. El pasado 8 de octubre, el delegado de Urbanismo, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, anunció la decisión de impulsar este proyecto como receta para frenar la crisis económica. El Consejo de la Gerencia aprobó el trámite inicial para la ejecución de esta nueva infraestructura al licitar la redacción de los proyectos de dos nuevos tramos de esta carretera presupuestados en 63 millones, aunque de momento sólo los estudios previos sólo necesitarán del desembolso de un millón de euros.
El primero de estos tramos enlazará la ronda supernorte (SE-20) con la autovía A-4 en un trazado de tres carriles en cada sentido. El trayecto tiene 3,5 kilómetros, un presupuesto de 35 millones de euros y un plazo de ejecución de 22 meses. El segundo enlazará la citada ronda supernorte con la SE-35, un tramo de dos kilómetros de longitud que requerirá de una serie de obras de envergadura, entre ellas, un paso sobre la plataforma ferroviaria y dos nudos viarios para conectar la Ronda Urbana Norte con el Polígono Industrial Calonge y la ronda supernorte. El coste se elevará a 28 millones y los trabajos se prolongarán durante 22 meses.
Las obras de estos dos tramos deben comenzar, si se cumplen las previsiones del equipo de Gobierno, a lo largo de 2009, al igual que el tercero de los trazados cuya construcción se ha acelerado en estas últimas semanas, el que enlazará la autovía A-4 y la variante de la A-92. En este caso, según informó ayer el delegado de Urbanismo, el proyecto constructivo está ya redactado. Se trata de cinco kilómetros, que requerirán de una inversión que asciende a 53 millones de euros.
Esta parte de la SE-35 se completa con el tramo de 13 kilómetros que enlazará las autovías A-4 -el nudo de la Gota de Leche- y la A-66. Este trayecto facilitará el desarrollo urbanístico de zonas como San Nicolás Oeste, Aeropuerto Viejo, Santa Bárbara, Higuerón Norte, Polígono de Reciclaje, San Nicolás Este, Buen Aire, Miraflores y el Nudo Logístico Norte. En total, casi 3.700 viviendas libres y 1.329 VPO. Este anteproyecto técnico fue aprobado por el Consejo de Gobierno de la Gerencia de Urbanismo el 8 de octubre de 2008.
"El Ayuntamiento tiene el empeño de posibilitar el desarrollo de nuevas zonas urbanas y residenciales, y para ello la SE-35 es un elemento fundamental según nos hacen saber los promotores inmobiliarios", explicó Gómez de Celis, quien incidió en que en 2009 se redactarán todos los proyectos del arco norte.
De hecho, a principios de octubre, la patronal de la construcción, Gaesco, advirtió de que los empresarios no podían urbanizar los nuevos barrios diseñados en el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) mientras no se acelerasen la construcción de infraestructuras. Uno de los proyectos en los que más incidieron los empresarios fue la construcción de la SE-35 por su capacidad de comunicar e integrar los desarrollos urbanísticos de estos terrenos.
La nueva ronda permitirá, además de mejorar los accesos a las zonas en desarrollo ya citadas, el impulso de los suelos de la nueva estación de mercancías de Majarabique, donde se trasladarán las instalaciones de Mercasevilla, ubicada en el polígono industrial situado en las proximidades del término municipal de La Rinconada.
