Menú
Local

Señales positivas contra la telebasura

Los dos batacazos casi seguidos que se ha llevado Tele 5 con las entrevistas en exclusiva a Luís Roldán, ex director general de la Guardia Civil, y a Julián Muñoz, ex alcalde de Marbella, constituyen...

el 15 sep 2009 / 18:53 h.

Los dos batacazos casi seguidos que se ha llevado Tele 5 con las entrevistas en exclusiva a Luís Roldán, ex director general de la Guardia Civil, y a Julián Muñoz, ex alcalde de Marbella, constituyen a nuestro juicio una de las señales más positivas contra la televisión basura en mucho tiempo. La falta de escrúpulos de los programadores de la antigua tele de las mamachichos al anunciar a bombo y platillo durante días los espacios con estos dos conocidos delincuentes, ha recibido un contundente varapalo por parte de la audiencia que hizo que esos días Tele 5 portara el farolillo rojo entre las televisiones de alcance nacional.

De confirmarse la tendencia a la baja de estos programas zarrapastrosos, estaríamos ante una estimulante reacción de los espectadores frente a la telebasura, muy digna de tenerse en cuenta después de unos años en los que no parecía haber límite para la mentira, la desfachatez, la calumnia y, sobre todo, la estulticia llevada al paroxismo. Debemos congratularnos con esta noticia y hacer votos porque represente el principio del fin del más miserable de los negocios televisivos. Aunque lo mejor sigue siendo lo que hacemos cada vez más españoles: no ver ese tipo de programas.

Las democracias avanzadas como la nuestra tienen algunas servidumbres de las que se aprovechan los espabilados, gentes sin principios ni sentido alguno de la ética periodística, para los que el todo vale es el único dios verdadero. Ello ha producido ingente cantidad de aventajados discípulos que son capaces de soltar las mayores barbaridades con tal de seguir siendo contratados en programas para los que no se requiere más preparación que la osadía y la desvergüenza.

La libertad de expresión, con la que todo periodista debe estar sin reservas, nos permite a muchos de nosotros manifestar públicamente lo que pensamos de esos mal llamados colegas. Pero no crean que a los tales profesionales del subgénero les molesta nuestras diatribas. Antes bien, las agradecen porque es la garantía de que su cotización no bajará. Cuanto más los pongamos a caer de un burro, más contentos. Cuanto más descalifiquemos sus programas, mejor para ellos.

De ahí que creamos ver un signo positivo en la caída de las audiencias de Tele 5 con las entrevistas a dos de los más conspicuos golfos de los últimos tiempos, convictos, confesos y condenados por los Tribunales de Justicia. Desde un punto de vista sociológico, según los expertos, la única manera de acabar con la telebasura es el hartazgo del público. Queremos pensar que la sobredosis de roldanes, julianes y pantojos está terminando con la paciencia del respetable. Y es que el exceso a que ha sometido esa cadena a sus espectadores tenía que reventar por algún sitio.

Mas no seamos ilusos, aunque momentáneamente nos alegremos de lo sucedido, porque al baranda italiano se le ocurrirá un nuevo triple salto mortal. Más difícil todavía, como decían antes en el circo.

Periodista

gimenezaleman@gmail.com

  • 1