Tal vez les suene la historia. Tras doce años ocupando puestos de responsabilidad en una gran compañía, de la noche a la mañana se encuentra en el paro. Tiene dos hijos y debe tirar hacia adelante como sea, así que se embarca en un proyecto emprendedor que no sale bien y en un segundo que también fracasa hasta quedar arruinado. Lejos de desanimarse, Guillermo Pardo ha vuelto a levantarse y ha emprendido otro proyecto, Familyapp, que acaba que arrancar pero que está teniendo una buena acogida. Y, encima, tiene trasfondo social porque se trata de ayudar a los que ayudan.
Dejando bien claro que no se trata de una ONG, sino de una iniciativa empresarial, Pardo explica la filosofía de su negocio, que consiste en que todas aquellas personas que colaboran con organizaciones no gubernamentales y fundaciones humanitarias sin ánimo de lucro reciban, por ese gesto, una serie de ventajas en forma de ahorro sobre servicios básicos, de manera que resulte incluso más atractivo hacer donaciones como socio de alguna ONG, independientemente de la cantidad desembolsada, porque, por ejemplo, si una persona dona 20 euros al año, siempre recibirá a cambio más de lo que entregue. Se preguntarán entonces cuál es su beneficio.
El mecanismo es el siguiente. Guillermo y los doce socios más que integran el proyecto son diez sevillanos, dos madrileños y uno gallego contactan con ONG especializadas en la ayuda a las personas (las organizaciones medioambientales y de defensa de los animales podrían incorporarse en una fase posterior) que se promocionan de forma gratuita en la página web www.familyapp.es. En el momento en que una persona decide hacerse socio de alguna de ellas (da igual la cantidad que aporte) puede beneficiarse de ventajas como ahorros en las facturas de la luz o el gas, de telefonía, de seguros, gafas graduadas, supermercados y alimentación, ropa infantil y clases de idiomas que son exclusivos para ellos. No van a encontrar cupones para fotodepilación ni viajes, sino ahorros para sus facturas. Esto es así porque las empresas colaboradoras que son las que aportan los ingresos de la empresa en concepto de comunicación y en algunos casos por comisión si aumentan las ventas están entendiendo el proyecto como una herramienta de responsabilidad social corporativa, ya que si no ofrecen descuentos no pueden participar. Así, la iniciativa ha arrancado con cuatro ONG el objetivo es alcanzar las 50 empresas y las 50 entidades sin ánimo de lucro en un año y con cinco empresas, puesto que Mapfre se adhirió ayer mismo con un descuento del 60% al contratar un seguro. Ya hay preacuerdo con 15 ONG y 28 firmas.
Confía para ello en el boca a boca porque, asegura, cuantos más seamos, más ayudaremos y también podremos conseguir mayores descuentos. Pardo deja claro que la donación va íntegra a la ONG porque nosotros no somos intermediarios, sino que lo ingresan directamente en las organizaciones. Entonces, reciben un nombre de usuario y una contraseña que les abre la puerta a todas las ofertas.
España es un país solidario, aunque de una forma muy puntual (básicamente cuando se producen catástrofes). Hay 3,5 millones de donantes que son socios de ONG, el 7% de la población, frente a tasas del 47% en Alemania, el 63% en Suecia o el 80% en Austria. El ambicioso objetivo que se marca es alcanzar los 10 millones de donantes, el 20% de la población, de aquí a dos años. Si te dicen que donando 30 euros vas a ahorrarte 100 euros ¿tú qué harías?, es la pregunta que lanza. Ahora falta por conocer cuál será la respuesta.
