Local

Seúl lleva el Ejército a la frontera tras las amenazas de Pyongyang

Cae el ministro de Defensa de Corea del Sur por la falta de reacción al ataque.

el 25 nov 2010 / 20:15 h.

TAGS:

Una mujer pasa junto a una casa destruida en la isla surcoreana de Yeonpyeong tras el ataque de Corea del Norte el martes.
El régimen de Corea del Norte amenazó ayer con efectuar "poderosos ataques físicos" a Corea del Sur, que decidió intensificar su presencia militar en las islas de la conflictiva frontera del Mar Amarillo.


Dos días después del suceso que acabó con la vida de dos militares y dos civiles en la isla surcoreana de Yeonpyeong, Corea del Norte advirtió a su vecino del Sur de que respondería a "cualquier provocación" con una "segunda y tercera ronda de ataques", según la agencia oficial KCNA.


El régimen de Kim Jong-il culpó además al Gobierno de Estados Unidos, principal aliado de Seúl, de haber sembrado la disputa en las inestables aguas del Mar Amarillo (Mar Occidental) por haber establecido de forma unilateral, al término de la guerra de Corea (1950-1953), una frontera demasiado cercana a las costas norcoreanas.
Las aguas de la costa occidental de la península coreana han sido escenario de numerosos incidentes entre los dos vecinos, aunque el del pasado martes es uno de los más graves en seis décadas. Corea del Sur, que tiene tropas permanentes en sus cinco islas del Mar Amarillo, ordenó ayer fortalecer la defensa en la zona a fin de estar preparados para "otra provocación" norcoreana que "puede ocurrir en cualquier momento", según el presidente Lee Myung-bak.


soldados reforzados. Los soldados desplegados en las islas verán reforzado su arsenal militar y recibirán armamento de última generación, según informaron ayer fuentes oficiales tras una reunión del presidente con sus ministros y asesores de seguridad nacional y economía. Además, el Gobierno de Seúl ha decidido modificar en esa zona las llamadas "reglas de combate", es decir, el nivel de su respuesta militar ante un posible ataque norcoreano, informó Yonhap.


Además, el ministro surcoreano de Defensa, Kim Tae-young, presentó ayer su dimisión. Según la agencia local Yonhap, el presidente surcoreano, Lee Myung-bak, aceptó su renuncia, reclamada por sectores que pidieron una respuesta más contundente del Gobierno ante las "provocaciones" del régimen comunista norcoreano. Antes de hacer pública su dimisión, el ministro de Defensa participó en una ceremonia en Seúl para rendir homenaje a los fallecidos, en la que calificó el ataque norcoreano como un suceso que "nunca debió ocurrir".


A pesar de la crisis entre los dos países, la pequeña isla surcoreana de Yeonpyeong comenzó ayer a recuperar la normalidad con la llegada del primer ferry desde la península, aunque aún es un trasiego de bomberos, militares y vecinos que intentan recuperar lo que quedó a salvo de los obuses y que temen el inicio de una época de penurias.

  • 1