Las calles de Sevilla cuentan ya con 1.832 bicicletas que han sido usadas 3,2 millones de veces. Pero estos datos contrastan un fenómeno que se ha generalizado en las últimas semanas: el vandalismo. Hay tres intentos de robo al día y se han sustraído 1.233 unidades. Se han recuperado 999, más del 80%.
Los primeros datos del informe que prepara Infraestructuras para la Sostenibilidad sobre el servicio público de alquiler de bicis revelan que el vandalismo en Sevilla es similar al que sufren otras capitales con un sistema parecido. Pero también reflejan que hay un repunte de este fenómeno en los últimos meses, especialmente los fines de semana.
Las más de 200 estaciones existentes en la ciudad han sufrido 1.132 intentos de robo, tres al día -las bicis no se han perdido pero han sufrido desperfectos-. Se han sustraído 1.233 unidades, de las que han sido recuperadas 999. Casi un 10% de las bornetas existentes -153 de un total de 1.832 han sido dañadas-.
Al margen de las actuaciones vandálicas en las estaciones de Sevici -un servicio que gestiona la firma francesa JCDcaux-, se han detectado 16.715 incidencias de carácter electrónico o mecánico, en torno a 40 al día. Una mínima parte de estos defectos se corresponden con fallos electrónicos en el sistema de expedición de billetes, mientras que la mayoría afectan a desperfectos detectados en las bicis provocados bien por el deterioro, bien por actos de vandalismo e intentos de robo.
Estos datos está encima de la mesa en las conversaciones que mantienen en estos momentos el Ayuntamiento y los representantes de la firma JCDcaux. Las dos partes están realizando un balance del servicio que puede derivar en la inclusión de determinadas modificaciones, ya previstas en el convenio firmado hace más de un año, en la prestación de este servicio público.
El Ayuntamiento mira hacia otras capitales. Los precios de Sevici están entre los más bajos de las ciudades que cuentan con un modelo de transporte similar -entre ellas Córdoba y Barcelona-. Fue una decisión política para impulsar este sistema, pero la aceptación ya ha quedado demostrada, lo que puede derivar en una revisión de los precios. Hay otras opciones. En ciudades como las citadas, así como en otras capitales europeas, las bicicletas tienen otra vía de financiación privada. Se emplean como soporte publicitario, una posibilidad que ya se barajó al impulsar este proyecto. Llevarla a cabo en estos momentos sería una forma de revisar los precios de un servicio que se ha extendido rápidamente por la ciudad, con los consecuentes aumentos del coste del mantenimiento y control de las bornetas, y que además sufre cada día más las actuaciones de carácter vandálico y los intentos de robo.
Los datos revelan que el sistema ya está afianzado: Sevici cuenta con 35.892 abonados de larga duración, mientras que 56.132 personas han adquirido títulos para un periodo determinado. La media de usos de cada unidad sigue en aumento y alcanza ya los 11,28 al día.
