La vertebración de Sevilla dentro del área metropolitana la dibuja el vicealcalde de la capital hispalense, Emilio Carrillo, con la multiplicación de zonas verdes, nuevos polígonos en la periferia y en el fomento del transporte para "evitar errores del pasado". El diseño lo plasmó el pasado mes de abril para el Centro de Estudios Andaluces.
La ponencia Proyectos estratégicos: Sevilla, leída por el concejal del PSOE para la Factoría de Ideas del Centro de Estudios Andaluces el pasado 11 de abril, concentra la contribución de la capital hispalense al área metropolitana, con la generación a su alrededor los ejes de las zonas verdes, que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad triplica respecto al anterior (de 1987), de 12 nuevas áreas industriales y el impulso al transporte, también para los viajeros que provienen de la corona de Sevilla.
Siete de estos proyectos han sido incluidos como áreas de oportunidad por el Plan de Ordenación del Territorio de la Aglomeración Urbana de Sevilla (Potaus), actualmente en periodo de exposición pública y alegaciones. Seis son industriales y uno, el desarrollo de Cortijo de Cuarto, residencial.
De los proyectos de zonas verdes destaca el salto de los 7,69 metros cuadrados por habitante a los 21,79, con Tablada, el Anillo Norte, entorno de Miraflores, la Matriz Verde Este y Guadaíra Sur.
Más palpables serán las áreas industriales. Se trata del nodo logístico en los accesos por la A-4 (Madrid-Sevilla), un millón de metros cuadrados incluidos como área de oportunidad para la Gran Sevilla; el Higuerón (entre Fasa-Renault y San Jerónimo), especializado en pequeñas y medianas empresas (pymes); el Centro Integrado de Reciclaje; Buen Aire-Aeropuerto Viejo (terciarios e industriales); el distrito Aeronáutico, de nuevo un área de oportunidad con La Rinconada; los espacios productivos de Santa Bárbara, Heineken y Peromingo, igualmente, área de oportunidad; la tecnópolis que se desarrolla en coordinación con la Universidad Pablo de Olavide y Alcalá de Guadaíra (la cuarta área de oportunidad); el distrito portuario (quinta); y el sector tecnológico de Palmas Altas-Guadaíra (la sexta).
En cuanto a la movilidad, destacan la planificación de la ronda de circunvalación SE-35 y, más allá de la ciudad, la SE-40, el paso hacia Valencina-Salteras y el soterrado hacia Cortijo de Cuarto, con el que se quiere descongestionar el Puente del Centenario. Y en el transporte, fuera de los ríos de tinta del Metro de Sevilla, un servicio de seis líneas de microbús por el centro de la ciudad y aparcamientos rotatorios.