Afganistán, Irak, Israel, Líbano y hasta la antigua Birmania (actual Myanmar). Son países cuyos nombres aparecen día tras día en los telediarios vinculados exclusivamente a conflictos bélicos o desastres humanitarios. No son populares por sus relaciones comerciales con Sevilla, pero aunque suene raro, existen.
En la mayor parte de los casos son vínculos más testimoniales que otra cosa, cifrados en varios miles de euros, pero en otros, los puntos más calientes del planeta -y no precisamente por sus temperaturas- mantienen una relación directa con Sevilla, más en particular, con sus productos, y en la que los intercambios comerciales generan ventas se sitúan entre los 200.000 euros y los 41 millones.
De las zonas más conflictivas por estar sumidas en guerras o estar más expuestas a catástrofes naturales, Sevilla tiene lazos comerciales con la práctica mayoría, en concreto con una docena de ellos, aunque hay un país que se impone con firmeza sobre el resto: Argelia.
Y es que, de los 54,5 millones de euros que Sevilla vendió al exterior a este tipo de mercados, algo más de tres cuartas partes las acaparó el país africano. ¿Preferencias? Fundición, hierro y acero lideraron las ventas, que superaron los 19 millones de euros (y las 47.000 toneladas), seguido de los cereales, por importe de 13,5 millones. Ya de lejos, maquinaria y material eléctrico, aeronaves, reactores nucleares y calderas, junto a plásticos atrajeron el interés argelino por Sevilla. Más significativo aún si cabe es la evolución del país respecto a la provincia. No en vano, el volumen de las compras realizadas ha crecido el 75% en sólo un año.
Junto a Argelia, Afganistán, Angola, Eritrea, Irak, Israel, Jordania, Líbano, Myanmar (la antigua Birmania), Pakistán, Siria y Sudán completan el listado de países a los que, inicialmente, pocos aspectos podrían relacionar con la provincia sevillana, salvo lo lejos que quedan de ella.
Pero no se trata de un intercambio esporádico o puntual, como confirman los datos de las Cámaras de Comercio, que constatan la evolución progresiva y ascendente que están registrando las exportaciones sevillanas a mercados tan singulares. Y es que en sólo un año, las ventas exteriores a este tipo de países han aumentado un 71%, si se comparan los 54,5 millones contabilizados en 2007 con el volumen del año anterior, que no alcanzó los 32 millones.
Si nos fijamos por cuantía de las compras, Israel se colocó en segundo lugar, con 6,2 millones de euros -centrada en todo tipo de maquinaria y en aceite y cereales-, seguido de Pakistán, donde algodón y aceite fueron los productos más demandados el año pasado. Por detrás, Jordania y Angola compartieron volumen de compras, en el entorno del millón de euros.
