El frío no será un problema este invierno para los municipios del área metropolitana, donde Sevillana Endesa desarrolla un plan de revisión sobre 90 kilómetros de líneas de alta tensión, 115 centros de transformación de baja tensión y 13 subestaciones.
Dentro del denominado Plan Invierno estas actuaciones tienen como objetivo que el descenso de las temperaturas y el consiguiente aumento de la demanda no repercuta en el servicio. De este modo, según informó la compañía en un comunicado, se busca evitar escenarios de riesgo en esta temporada y mejorar la calidad del suministro.
Este programa contempla tanto medidas de prevención como acciones de rápida implantación que garanticen la continuidad del suministro. En resumen, se trata de evitar los apagones en momentos críticos cuando se producen picos de consumo. Para ello, Sevillana Endesa ejecuta distintas medidas, como termografías, y realiza inspecciones exhaustivas de las instalaciones de alta, media y baja tensión de las que dispone.
Igualmente, la compañía refuerza el personal en las brigadas técnicas e incrementa el material de repuesto en los almacenes. De igual modo, el Plan Invierno incluye un protocolo de actuación que se activa según desciendan las temperaturas -lo que está ocurriendo estos días- y crezca la demanda para aumentar a su vez el nivel de vigilancia de la red.
En definitiva, todas estas acciones, cuyo coste se incluye dentro del proyecto de inversiones de cada año de Sevillana Endesa, tienen la finalidad de detectar posibles anomalías y corregirlas para mejorar y reforzar el suministro. Las inversiones en el año que ahora acaba superarán los 100 millones de euros para la provincia de Sevilla.
